Sin ti no somos nada
Encorvados, cabizbajos esperamos el atardecer con mucha ansiedad
No sabemos si electricidad habrá.
Para alumbrar las parejas que al llegar la noche nos acompañaran, y alegraran un rato nuestra soledad.
Tal vez vendrán niños a corretear, a lanzar piedras al mar dando vida y alegría a este lugar.
Aquí estamos sin movimiento, sin respirar solo esperando la hora de poder brillar, y así inundar de luz todo el lugar.