¿Las leyes regulatorias son una amenaza al mundo cripto?

ale.aristeguieta (64)in #criptomonedas • 4 years ago

Cuando el bitcoin y las altcoin salieron de las sombras, solo las utilizaban inversores aventureros. Ahora que la banca, las leyes que rigen el capital de los estados y sus grandes inversiones se han visto comprometidas por la tecnología criptográfica, estas comenzaron a sentirse amenazadas. Sobre todo luego de observar el crecimiento exponencial que se produjo en la capitalización del Coin Market Cap entre 2017 y 2018.

Bitcoin tiene un origen un tanto oscuro. Desde su nacimiento en el 2008, se ofrecía como el medio de intercambio en la Deep Web y se usaba como medio de encriptación para el envío de archivos y mensajes de forma descentralizada y anónima. Desde su nacimiento, la empresa blockchain de Satoshi Nakamoto, El Bitcoin Core, ha inspirado a otros emprendedores, como Vitalik Buterin o CZ, el CEO de Binance, a formar sus propias empresas cripto. En el transcurso del tiempo, BTC demostró no solo ser un activo capaz retribuir más del 750% a quien ha invertido en él, sino que su tecnología se ha ido adoptando y expandiendo por el mundo.

Las altcoins también desarrollaron su propio ecosistema. Blockchains como Ethereum dieron paso a los Assets y OTX a el Stacking. En el desarrollo de nuevas tokens y sistemas de recompensa se atrajo a más inversores, incluso grandes empresas.

Sin embargo, el interés principal de las criptomonedas se ha mantenido siempre en el poder de intercambio que tienen como objeto de valor y su capacidad de cotizar frente a monedas Fiat, como el USD, lo que ha producido en estas últimas una depreciación. En el caso del bitcoin contra el dólar, esta se ha depreciado en más del 19.000%.

En el desarrollo de este nuevo mercado financiero se acercaron e introdujeron nuevos actores y grandes capitales. Pero así como han crecido los interventores y hedge funds mientras se acumulan millones, autoridades como la SEC y otros entes reguladores han comenzado a ponerle el ojo. No solo por las cantidades excesivas de dinero que circulan en el mercado a través de las criptomonedas, sino por la facilidad con la que se mueven tan grandes cantidades en cuestión de segundos, de forma completamente anónima y fuera del alcance de cualquier ente regulador.

Esta particularidad de la criptografía la ha hecho un blanco de acusaciones de lavado de dinero con criptomonedas, como las denuncias presentadas por el Departamento de Delitos Informáticos del FBI, de venta de drogas, pornografía infantil, entre otros abusos y crímenes cometidos en la Deep Web. A pesar de lo que sucede allí, las leyes regulatorias nacen por otros motivos, uno de ellos, el que las cripto supongan una amenaza para el sistema financiero tradicional.

A pesar de que grandes bancos actualmente invierten en blockchain y activos específicos como XRP o Tezos, no quiere decir que pronto vaya a poder retirar bitcoins de su banco más cercano. Y la respuesta de muchos Bancos Centrales es que les parece muy peligroso el mundo cripto, ya que no tiene ningún control ni ente regulador que pueda verificar, mantener y supervisar la transparencia de las transacciones. Algo que la tecnología blockchain puede hacer por sí misma sin necesidad de un tercero.

El tema del lavado de dinero ha de ser uno de los puntos sobre los que las regulaciones hagan más hincapié. La criptografía brinda la capacidad de cambiar dinero fiduciario por cualquier activo con más valor sin regulación alguna, así como enviar y distribuir los fondos entre muchas billeteras y otros activos. Razón por la que han puesto regulaciones y exigencias para los distintos exchanges, como el KYC (verificación completa de documentos) o como la reciente ley de los Países Bajos, la AML5, que obligó a dos exchanges a salir del mercado. El continente asiático no se ha quedado atrás y Japón ha realizado tanto un departamento especial este año, la Agencia de Intercambio de Moneda Virtual de Japón (JVCEA), como la Ley de Servicios de Pago (PSA), para comenzar a tener un control mucho más estricto de la industria en el país.

Este tipo de regulaciones tarde o temprano iban a llegar, pero no son realmente una amenaza para el ecosistema cripto. Ellas son una manifestación del sistema financiero actual adaptándose y tratando de centralizar en menor o mayor medida el uso de estos instrumentos. Sin embargo, ello no cambia la naturaleza del cripto ni del blockchain. Producirán ciertos cambios y traerán nuevos agentes, pero no son su fin.

Todo inversor de criptomonedas deberá de una u otra forma adaptarse a estas regulaciones, que seguramente irán creciendo y desarrollándose a la par de este nuevo sistema financiero. Pero si de algo podemos estar seguros, es de que el cripto mercado llegó para quedarse y que las antiguas instituciones deberán adaptarse a la nueva tecnología. Los crímenes de lavado de dinero y su uso para fines ilícitos siempre han existido y criminales de cuello blanco aún lavan millones de dólares en instituciones bancarias, reguladas. Dichas leyes para el cripto son la representación del temor de estas instituciones y de diversos poderes financieros que quieren tener el control.

Lo más preciado de este viaje, en el cual estamos inmersos gracias a Satoshi Nakamoto, es que se demostró que el dinero no depende de ninguna institución que imprima billetes, sino de una tecnología a la que cualquiera puede acceder, minando desde la comodidad de su hogar. La descentralización total del dinero y del sistema financiero representa una de las expresiones más libertarias de la historia humana. Lo que antes fue de unos pocos ahora es de libre acceso y de cada uno de los que estamos interesados en este gigantesco mundo del cripto.

Comparte tu opinión acerca de la descentralización y las regulaciones. ¿Crees que esto podrá frenar el crecimiento de la industria criptográfica?