PRIMER CONCURSO DE RELATOS EROTICOS PAPIKIWI 07/01/2018

hola steemer este  mi relato erótico espero que les guste y si es así no olviden apoyarme y votar  

• nombre del relato: EMPAÑA MI MENTE. 

   13 de diciembre. Después de una entretenida conversación por teléfono no aguantábamos las ganas de vernos una vez más, así que quedamos en vernos esa misma noche para hablar toda la madrugada, sentarnos en esa vieja mesa que ya tenía recuerdos de nosotros noches anteriores. Fui a vestirme para esperarte por varios minutos ya que la distancia que había entre los dos era larga pero sin embargo eso jamás impedía nuestro encuentro. Luego de una larga ansiosa y nerviosa espera te vi llegar una sonrisa única labios pintados de turquesa que hacían que verte más linda y sensual ojos negros que incitaban a una mirada tan tierna seria y ala ves desconocida tu cabello largo de tonos negro azulado era tu punto más fuerte. La típica agarrada de manos hasta mi casa, pero antes pararnos a cenar y comprar lo necesario para pasar esa noche. Llegamos al parque comimos reímos y comenzó a caer la noche, debido al mes el frio comenzó a molestarnos estábamos tan metidos en lo nuestro que no tomamos en cuenta ese pequeño percance, las horas pasaban y nuestra compañía y nuestras vivencias era lo único que importaba en aquel entonces, los temas de conversación tocaban más a los antiguos encuentros de sudor y placer. El frio cada vez más intenso y ya los abrazos no estaban haciendo efecto en nosotros. Recuerdo con claridad tu mirada de inspiración al decirme ― ojala tuviésemos un auto para resguárdanos. En ese momento te mire y dije ― mi padre siempre deja la llave colgada no sirve pero podemos entrar hay. Tu solo reíste, respondiste ― estás loco. Sin hacerte mucho caso te aparte cogí mis llaves y dije― ya vuelvo tú me miraste y dijiste― aprovecha y bájame agua y un sweater o moriré de frió. Subí rápido abrí la puerta con ladrón en la noche pase por la sala como un ninja y con unas manos ágiles cogí las llaves del auto, cuando baje tu mirada fue de extrañada― ¿el agua y el sweater? Yo sin responderte te mostré las llaves del auto te cogí de la mano y subimos al estancamiento cuanto estaba abriendo el auto me dijiste dos veces que me veía muy serio con abriendo la puerta. Entramos cerramos las puertas y el calor llego y nos abraso de una manera muy placentera ― ya tengo sueño me pasare atrás, yo me quede en el asiento del conductor me pateaste por la parte de atrás ― ven que aún tengo algo de frió. Me pase y me acosté encima de ti. FUENTE  Y en ese momento no hubo palabra. Si los ojos son las ventanas del alma en ese momento nuestra mirada dijo lo que nuestros cuerpos estaban esperando solo hubo un beso de inicio para encender todo el lugar mordías lentas que y van aumentando la intensidad del momento mi mano comenzaba a moverse sola tocaba tu caballo negro, el sonido de tu respiración comenzaba a meterme en nuestro mundo, cada vez mis caricias hacían más efecto y tu sin una palabra pero tu piel me respondía cuando se erizaba y es en ese preciso momento cuando te mire a los ojos me separe y dije ― tienes algo en todo el cuerpo que me molesta. Tu solo te mordiste los labios levantaste los brazos y yo hice el resto el olor de tu piel y tu sudor era en ese momento el mismo por el cual el hombre del perfume mato a aquella chica en Francia. Tú hiciste lo mismo y cuando te acostaste y sentí tu piel fue una conexión instante una dinamita que termino de detonar todo ya para ese momento nuestro vapor corporal hacía que los vidrios del auto se comenzaran a opacar. FUENTE Seguimos avanzando sin ningún pero o retroceso, cada pequeña instante cada prenda de ropa que te quitaba era un momento de total elixir hasta que como un juego ninguno de los dos tenía nada con que estovar más solo eran dos cuerpos a plena flor de piel. Me lanzaste la mirada que yo ya conocía de antes que aceptaba el la siguiente fase y fui hay cuando ya éramos uno pero esa noche no era cariñoso el momento era tanto desenfreno junto que nos dejamos llevar por lo salvaje, cada movimiento cada sonido generado cada entrada y salida era una un Gig bang que lo hacía todo, tus movimientos eran como de película tu cabello y espalda sudada le daba el toque especial, tus gemidos eran la mejor canción. Y con un último suspiro de placer mutuo termino todo. Después de eso miraste al espejo empañado pasaste la mano volteaste y me dijiste― ni el Titanic nos gana esta vez amor. 

FUENTE

Este post es patrocinado por   @purapapita y @vicokiwi  muchas gracias