Concurso 1500 Followers - Me enamoré de una mariposa

Mi nombre es alex, y he dejado ir al amor de mi vida, ¿saben? yo no creía en el amor hasta que la conocí. Irónicamente ella tampoco creía en el amor, y no lo decía por haber sufrido un mal de amores, lo decía porque siempre la lastimaron aquellas personas cercanas a ella, aquellas personas que se suponen deberían de haberle enseñado lo bonito que es amar, y que a pesar de que existan peleas y obstáculos, podría funcionar.

De seguro se preguntan quién es y cómo la conocí, pues bien, la llamaremos Julieta, obviamente no es su nombre real, por protección, debido a que esta publicación podría accidentalmente llegar a su casa y no quiero causarle más problemas con su padre.

Bien, prosigamos, Julieta y yo nos conocimos en la fiesta de cumpleaños de mi mejor amigo, ya saben esas típicas fiestas donde va todo el colegio y se vuelven locos. Julieta y yo teníamos clases en común pero jamás entablamos una conversación, por algún motivo jamás tuvimos necesidad de hablarnos.

Yo caminé hacia ella, la vi sola en aquella casa tan enorme y se notaba incomoda y fuera de lugar allí, así que me animé a llevarle una cerveza, no iba con ninguna otra intención más que tratarla bien y que se animara un poco.

Buenas noches querida, ¿gustas de una cerveza?, normalmente te ofrecería un poco de vino pero pues, solo hay cerveza - dije, mientras le ofrecía el vaso y una de mis mejores sonrisas. Recuerdo perfectamente que esa noche se podían ver las estrellas, era una noche mágica, debí de haberlo imaginado no todas las noches conoces a una mariposa. Mi comentario hizo que se riera, recuerdo haber pensado "que hermosa se ve así"

Gracias, ¿nos conocemos? -me preguntó mientras tomaba un trago de cerveza.

Creo que no, pero si gustas tenemos toda una noche por delante para hacerlo -dije, incapaz de dejar de ver sus hermosos ojos, esos benditos ojos tan azules como el mar, me volvieron loco aquella misma noche.

Eres gracioso, soy Julieta, mucho gusto - dijo. Recuerdo haber pensado por un momento que carajo estaba haciendo allí, en vez de estar con mis amigos, pero sencillamente sabia que era allí donde tenia que estar.

Es para mi un honor conocer a una hermosa damisela como tu, soy Alex, y reitero es un placer conocerte -Y así comenzamos a hablar tranquilamente en el patio trasero, primero hablamos de cosas triviales, luego surgieron temas más personales, así fue como me enteré que ella no creía en el amor y como su padre, el hombre que se supone la protegería, maltrataba a su madre y la golpeaba a ella también.

Juro que sentí ganas de matarlo, pero yo no podía hacer nada, ellas ya lo habían denunciado un par de veces, pero la justicia nunca hizo nada, salvo empeorar las cosas. Yo le conté de mi infancia, el abandono de mi madre. Le molestó el hecho de mi madre nos abandonó a mi padre y a mi, cuando a penas tenia 3 años, pero le tranquilizaba que mi papá fuera dulce y cariñoso, incluso deseó que él fuese su padre.

Luego de aquella noche, charlábamos siempre que coincidíamos, luego empezamos a salir, mis amigos me decían que ella me había cambiado, la presenté a mi padre, venía casi siempre a almorzar. Siempre que podíamos estábamos juntos, me acostumbré a ayudarla con sus heridas, y ella le daba un toque femenino a mi casa, papá la consideraba su hija, pero ella jamás nos dejó ayudarla.

Un día simplemente no tuve más noticias de ella, no fue más al colegio, nadie sabia nada de ella. No sabía donde vivía, nadie sabía, tenía miedo de que su padre le hubiese hecho algo grave. Llegue a casa, día tras día, destrozado. Releyendo la única cosa que tenia de ella, una pequeña nota que dejó en mi casillero:

"A veces tenemos que dejar ir a quienes amamos, y no porque no podamos darles todo aquello que se merece, sino por el simple hecho de que no somos el uno para el otro. Si, creo en esto de las almas gemelas, si no fuera cierto ¿Qué sentido tiene la vida?...

Te amo, siempre tuya, Julieta"