REFLEXIÓN: ¿SOBRE QUE CONSTRUYES TU FE?
Desde la década de los 50 del pasado siglo, el movimiento cristiano evangélico en sus distintas formas ha venido creciendo a pasos hiper agigantados; pasando de pequeñas estructuras donde se reúnen sus fieles hasta mega iglesias donde el número se vuelve como la arena del mar.
Ya sea en un lugar pequeño o grande, lo que verdaderamente importa es la palabra expuesta, y que tan fiel y apegada es esta a las Escrituras y al diseño de Dios para estos tiempos y los venideros.
Debajo de los cielos, en el mundo en que vivimos; ya sea en las naciones o dentro de nuestras congregaciones ha comenzado desde décadas atrás una carrera por hacernos un nombre entre la humanidad. Y muchos ministerios se han inflado como una burbuja y han crecido en gran manera pero están próximos a ser expuestos pues su obra nace de sus corazones con sed de fama y no apegados a la voluntad del eterno. Por otro lado existen ministerios en el anonimato que pasan desapercibidos, el cual puede ser tu caso que con un corazón dispuesto sigues apegado y fiel a los propósitos de Dios.
Llegará el día cuando todos compareceremos ante el tribunal de Cristo y debajo de nuestros pies se encuentre el mar de vidrio mezclado con fuego donde nuestras obras serán juzgadas y pesadas. Pues no importa cuán grande e impactante sea la obra que estés haciendo o cuanto trabajas para la obra del Señor, pregúntate si es esto lo que el Señor te ha mandado hacer, pues mejor es la obediencia que los muchos sacrificios.
Enseñas a otros cual es la buena voluntad del Señor y las Escrituras de una manera sana, o enseñas tus propias ideas producto de una mente inflada buscándote hacer un nombre en medio de la sabiduría humana, porque de toda palabra corrompida el hombre dará cuenta cuanto comparezca ante aquel cuyos ojos son como llamas de fuego.
No es tarde, para enderezar nuestros pasos y enmendar nuestros errores, pues tenemos a un Dios rico en misericordia y en un amor sin límites, y ante Él somos administradores de su gracia y de las Escrituras que se nos han sido reveladas.
Este año 2019 es clave para lo que Dios va a ser en medio de su pueblo, Dios quitará las cortinas de humo que ministerios falsos han levantado opacando ministerios que aún se mantienen fieles a Dios. Se parte del gran despertar que pronto está por comenzar.
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Desde la década de los 50 del pasado siglo, el movimiento cristiano evangélico en sus distintas formas ha venido creciendo a pasos hiper agigantados; pasando de pequeñas estructuras donde se reúnen sus fieles hasta mega iglesias donde el número se vuelve como la arena del mar.
Ya sea en un lugar pequeño o grande, lo que verdaderamente importa es la palabra expuesta, y que tan fiel y apegada es esta a las Escrituras y al diseño de Dios para estos tiempos y los venideros.
Debajo de los cielos, en el mundo en que vivimos; ya sea en las naciones o dentro de nuestras congregaciones ha comenzado desde décadas atrás una carrera por hacernos un nombre entre la humanidad. Y muchos ministerios se han inflado como una burbuja y han crecido en gran manera pero están próximos a ser expuestos pues su obra nace de sus corazones con sed de fama y no apegados a la voluntad del eterno. Por otro lado existen ministerios en el anonimato que pasan desapercibidos, el cual puede ser tu caso que con un corazón dispuesto sigues apegado y fiel a los propósitos de Dios.
Llegará el día cuando todos compareceremos ante el tribunal de Cristo y debajo de nuestros pies se encuentre el mar de vidrio mezclado con fuego donde nuestras obras serán juzgadas y pesadas. Pues no importa cuán grande e impactante sea la obra que estés haciendo o cuanto trabajas para la obra del Señor, pregúntate si es esto lo que el Señor te ha mandado hacer, pues mejor es la obediencia que los muchos sacrificios.
Enseñas a otros cual es la buena voluntad del Señor y las Escrituras de una manera sana, o enseñas tus propias ideas producto de una mente inflada buscándote hacer un nombre en medio de la sabiduría humana, porque de toda palabra corrompida el hombre dará cuenta cuanto comparezca ante aquel cuyos ojos son como llamas de fuego.
No es tarde, para enderezar nuestros pasos y enmendar nuestros errores, pues tenemos a un Dios rico en misericordia y en un amor sin límites, y ante Él somos administradores de su gracia y de las Escrituras que se nos han sido reveladas.
Este año 2019 es clave para lo que Dios va a ser en medio de su pueblo, Dios quitará las cortinas de humo que ministerios falsos han levantado opacando ministerios que aún se mantienen fieles a Dios. Se parte del gran despertar que pronto está por comenzar.
Excelente reflexión, muy buen post.
Amigo excelente artículo de como debemos construir nuestra fé, saludos!