Pensamiento Lógico-Matemático. Libro de Actividades

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Saludos para toda la comunidad de steemit. Voy a iniciar este post hablándoles sobre los apoyos con que debe contar el niño que está incluido en el sistema educativo, ya que son los que le van a permitir apropiarse y beneficiarse del currículum escolar. Recordemos que, el término inclusión va dirigido a la población que se encuentra en desventaja frente al resto del estudiantado, bien sea por una necesidad educativa especial, una discapacidad, problemas nutricionales graves, familia disruptiva, secuela de abusos, entre otros.

En la escuela, los contenidos de cada área curricular y de cada grado se desarrollan en el aula por medio de proyectos que el docente utiliza para que los niños alcancen las llamadas competencias de grado. Para realizar este trabajo, el maestro se apoya en actividades mediante la aplicación de las estrategias que considere idóneas para el logro de los objetivos de su planificación.

Pero, qué pasa cuando en el aula el maestro tiene niños con ritmos y estilos de aprendizaje muy diferentes. Y no estoy diciendo “ritmos y estilos de aprendizaje diferentes”, ya que esto es lo naturalmente cotidiano en el aula; me estoy refiriendo a “ritmos y estilos de aprendizaje muy diferentes”.

Y en este punto retomo la idea del primer párrafo sobre los sistemas de apoyo. Existen niveles diferentes en cuanto a tipos y formas: específicos, transitorios y/o permanentes. Tony Booth, Mel Ainscow y Denise Kinsgston, en su libro Índice de Inclusión, desarrollo del juego, el aprendizaje y la participación, manejan este tema y definen los apoyos como lo que reduce las barreras entre el niño y el aprendizaje.

Una de las debilidades en el proceso de inclusión escolar es la adaptación curricular. Siendo la principal estrategia, entre estos sistemas de apoyo en la escuela, para propiciar condiciones y oportunidades de participación al niño. Pero existen otros aspectos que no se han podido superar: ajuste a la zona próxima de desarrollo (ZPD), especificación de los contenidos, tiempo durante el cual debe emplearse, diseño, adecuación al perfil cognitivo del niño; pero sobre todo que están creando dependencia ya que no proporcionan un desvanecimiento adecuado de los niveles de ayuda y más temprano que tarde terminan convirtiéndose en bastones, lamentablemente permanentes.

[Fuente de la imagen: archivo] (Mira en el registro el trabajo en forma permanente y progresiva con los niveles de ayuda, que son los que permiten observar cuán lejos o cerca estamos de la ZPD del niño. )

Los bastones son la consecuencia inmediata del atraso pedagógico, la repitencia e inevitablemente, en algún momento, el abandono de la escuela. De allí la importancia que la adaptación curricular tienen en el proceso de inclusión educativo del niño en la llamada “escuela común”.

Mi Proyecto

Es por ello que inicié un proyecto, hace ya varios años, para contribuir a mejorar esta situación. Este el fruto del trabajo sistemático de mi experiencia con niños incluidos, del estudio sobre el desarrollo, de los diferentes enfoques teóricos, de la revisión permanente de bibliografía actualizada; pero sobre todo, lo más importante, fue el resultado del intercambio diario de experiencias con los docentes.

Este trabajo tiene sus bases teóricas y prácticas en los grupos etareos de 3 a 6 y de 7 a 12 años. La pertinencia de ubicar esta investigación en estas edades se debe a que es donde se asientan el origen de procesos lógicos-matemáticos. Son textos de actividades adaptadas al perfil cognitivo, de desarrollo del niño y a los objetivos curriculares del grado. Este que les voy a presentar será el primero de 8 post consecutivos.

Primer libro de actividades : Conocimientos lógicos matemáticos para niños del nivel inicial y primaria

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Los conocimientos lógicos matemáticos no se enseñan (mira que el título dice: comprensión), más bien nos orientan para entender el pensamiento del niño y encontrar estrategias de estimulación. Para los teóricos cognoscitivistas, Piaget principalmente, es válida la siguiente clasificación:

• Los conocimientos infralógicos, que se refieren a la comprensión de las relaciones entre propiedades y objetos físicos en el mundo real. Estos abarcan los conceptos lógicos: todo/y/o/siempre/nunca. Es decir, es el producto de la combinación de los conocimientos físicos con los conocimientos lógico-matemáticos.

• Los conocimientos lógico-matemáticos propiamente dichos se basan en la construcción de la noción de grupos y subgrupos. El niño debe identificar las categorías dónde situar un objeto e identificar las categorías que abarcan totalmente otras; hasta construir la regla.

Todo este proceso constructivo se consolida con el concepto de número, el cual forma el eje central del desarrollo del pensamiento lógico-matemático. Cuando el niño logra integrar todas estas nociones y conceptos es capaz de manejar como una especie de síntesis de la clase (grupos y sub grupos/categorías) y la relación asimétrica transitiva (un número es más grande que el que le antecede y más pequeño que el que le precede). Es complejo, e implica el dominio de varias nociones simultáneamente coordinadas que se van construyendo y deconstruyendo hasta que el niño es capaz de dominar el concepto.

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Es por eso que resulta inútil enseñar el número de manera directa. Primero se deben desarrollar requisitos, construir las nociones y la lógica entre las mismas. Las experiencias de conteo mecánico tienen muy poco o nada que ver con el desarrollo del concepto de número; estos son aspectos puramente verbales y carentes de significado.

En este libro se plantean actividades que, progresivamente e iniciando desde la Zona de Desarrollo Próximo del niño, estimulan y consolidan la construcción del pensamiento lógico-matemático, partiendo de actividades atractivas adaptadas para el grado y propuestas por el currículum.

Espero que te haya gustado este post; pero sobre todo que te haya servido de ayuda. Nos vemos en una próxima entrega.