Norias [A veces se esta arriba, otras no tanto]

CAPITULO 2

Como todos los días de nuevo suenan mis infinitas alarmas... ok solo son 5 pero igual les doy posponer, pongo cada una 3 veces por lo que me estoy parando desde las 4:00 am y ya son las 8:00 am, cuando por fin logro levantarme, tomo una ducha, mi mochila, la guitarra y me voy sin ver a Manie, pues hoy ella esta libre y no quiero despertarla, hoy me toca reencuentro con Brenda, (La Bruja) mi profesora de Guitarra, es una perra.

Me compro un expreso y una dona en la tienda de siempre, los como mientras tarareo el solo que presentare en unos minutos y me monto en el transporte publico, tomo un asiento de dos que esta vacío y me pego a la ventana, mañana es la salida de chicas y me encuentro ansiosa, era hoy pero la cambiamos a mañana debido a que tengo libre mañana. Me encanta observar todo pasar a mi alrededor, a veces rápido, a veces lento, otras veces me quedo dormida, pero hoy siento una paz, me siento bien, y descansada.

Noto como alguien se sienta a mi lado y sin tomar mucha importancia sigo en lo mio hasta que una mano toca mi hombro, me giro y observo un chico con gafas de sol, gorra negra, franela beige y pantalón de jean desgastado observándome, se curva una sonrisa en su rostro hasta que decide a hablar.

—Hola, me podrías decir ¿que hora tienes hermosa?. -odio que usen esas palabras tan cursis conmigo, sobretodo los desconocidos, ignoro todo eso y le respondo-.

—8:20... -simple y sin muchos rodeos, me giro nuevamente a mi posición inicial, y este vuelve a tocar mi hombro, ya un poco molesta me giro y le encaro-.

—¿Que quieres?... -Me ve perplejo, enmarca una ceja y sonríe de lado-.

—Que Odiosa, y tan hermosa que eres...

—Esta un poco trillada esa frase, y tengo espejos en casa, se que soy hermosa. -si soy muy egocéntrica lo se, pero a esta clase de tipos patanes hay que tratarlos así-.

—Mmm eres de las difíciles, me gusta... -pero ¿que demonios le sucede? es que acaso no entiende...-.

—Te agradezco no me molestes, no me conoces ni yo a ti, así que sigue tu camino, adiós. -toco el botón de parada en el bus, y me sujetan de mi camisa.-.

—Nos volveremos a ver Moni... -ok, eso si me dio miedo, ¿como demonios sabe mi nombre? lo miro con los ojos muy abiertos y me bajo del bus sin mirar atras, me reviso la ropa, la pantalla del cel, mi guitarra... un momento... MALDICIÓN DEJE MI GUITARRA EN EL BUS.

Corro como si mi vida dependiera de ello hasta la siguiente parada del bus, cuando ya estoy bastante cerca se baja el chico molesto junto con mi guitarra, el me observa con una sonrisa torcida y me extiende la guitarra.

—Te dije nos volveríamos a ver Moni...

-me sorprende que sepa mi nombre, ¿sera de la academia?-.

—Oye se que no te conozco, ¿como sabes mi nombre?... Amm y gracias por devolverla.

Llegare tarde a la clase con la arpía de Brenda.... No me dejara pasar y hoy es mi solo, debo inventar una buena excusa.

—No hay de que hermosa, vas tarde ¿cierto?

Debe ser adivino o algo así...

—Demasiado... Perderé mi solo, hoy es mi prueba individual.

—Te daré una buena excusa, ven te llevo.

—¿Como me llevaras cerebrito? Venias en el mismo bus que yo, Además recuerda aun no te conozco y no se de donde sabes mi nombre, y yo ni se el tuyo.

No es que quiera saberlo, pero si me llevara es lo mínimo que debo conocer ¿o no?.

—Me llamo Arwin, pero todos me dicen Aron, pero por ser tu puedes decirme Arwin, para mi es mas personal que mi apodo.

—Mejor, esta bien Arwin, pero sigo sin saber como me conoces y como me llevaras...

—Te conozco, desde hace años, luego te explico... Vas tarde ¿no? Vamos y luego aclaro tus dudas hermosa.

Sin pensarlo mucho lo sigo, no confió en el pero voy tarde, se que luego me arrepentiré pero la vida es una y hay que vivirla... Ok soné a Mark Anthony...

Llegamos a un callejón, el miedo me invade pero seguimos caminando, y para mi sorpresa bajo unas cajas hay una motocicleta ultimo modelo y la quijada me llega al piso, es hermosa.

—Adoro las motos. - ¿enserio? es lo único que logro articular...

—Que bueno, pues iremos en esta...

—¿Es tuya? -pero que tonta soy, de verdad no entiendo porque tan nerviosa-.

—Si, ahora vamos pequeña preguntona, llegaras tarde...

Sin pensarlo me subo en la moto, el enciende el motor y yo me quedo estupefacta mirando cada detalle de el, sus facciones, expresiones, su respiración, su cabello, sus marcas, y sus tatuajes.

No es porque me guste, es que busco de donde lo conozco, algo me dice ahora que si lo conozco pero no entiendo que es esta sensación.

—¿Te gusta lo que vez? -me dice-.

Si no es brujo tiene ojos en la espalda.

—Pues no te creas tan importante, solo veo de donde te conozco, aun no encuentro pista de nada, no se quien eres.

—Soy Arwin ahora, antes mi nombre era Diego. -ahora todo tiene sentido-.

Mi corazón se detiene ante la mención de aquel nombre, no es posible que sea el.

—¿¿Di..Diego?? ¿Diego Scott? -no puede ser-.

—El mismo, veo que te olvidas rápido de los amigos ¿no?

No fuimos precisamente amigos, mi mama lo detestaba... Y yo pues me encariñe mucho con el.

— Co... Como olvidar mi primer beso...

Suelta una sonora carcajada ante la mención de aquel momento y me ve por el espejo retrovisor, me sonríe y en este instante puedo ver que bajo esa fachada de chico malo esta Diego, el verdadero Diego del que estaba enamorada.

—Cuanto tiempo sin vernos Minie....

El me decía Minié, nunca supe porque pero así me decía.

—Ya no soy una niña Diego... Pero don Arwin, no me llames así.

—Sabes es de cariño. -dice-.

Apaga el motor y nos bajamos frente a le'Gianelle, nunca le di la dirección, ¿como rayos supo llegar?

—¿Como supiste donde era? - le pregunto-.

—Llevo días pasando cerca de ti. -miedo de nuevo, esto da miedo-.

—¿Ahora me espías? ¿debo llamar a la policía y asustarme? -pregunto indignada-.

Se ríe nuevamente y niega.

—Solo me cercioraba de que fueras tu, llegue a esta ciudad hace unos días. -eso no responde todas mis inquietudes pero algo es algo-.

—Ok basta de charla entremos, ya tendremos tiempo para ponernos al día.

Pasamos la recepción del instituto, y subimos hasta el salón donde esta la arpía, toco la puerta dos veces y cuando voy a girar el pomo esta se abre mostrándome una sonriente Brenda, sonrisa que se borra al ver que soy yo...

Termina de abrir la puerta y salen 2 chicas que ya presentaron su prueba y agradezco haber llegado antes que se fuera.

—No son horas de llegar Mónica, me temo no podrás presentar tu solo.

Me lo esperaba, no me sorprende que sea tan perra, Arwin da un paso adelante y la observa de arriba a abajo.

—Mucho gusto guapa, soy Aron, la chica aquí a mi lado llego tarde por mi culpa, la choque mientras cruzaba la calle para venir a aquí, la iba a llevar donde un medico pero no quiso por no perder su prueba, no seria justo que no presentara ¿no crees hermosa?.

Y La perra no hace mas que sonreirle, le deberían dar el globo de oro a la mas cachonda, me sorprende... nunca pensé fuese tan regalada de andar coqueteando con un chico al que no a visto en su vida.

—Puedes pasar Mónica -por fin habla, estuviese Manie aquí para que viera lo tonta y la baba que le escurre- presentas rápido y te vas al medico, no quiero una demanda en mi contra, amm y tu compañero puede pasar si quiere.

Hablaba y hablaba yo solo escuchaba bla... Bla... Blaa, la detesto... Siguió hablando...

—¿Se conocen? ¿O solo la traes por el accidente? -inquiere la arpía-.

—Si nos conocemos, fue una casualidad, desafortunadamente no es el mejor de los momentos para un reencuentro.

— A ok, bueno Mónica comienza con tu solo.

Me olvido de los presentes, me concentró en mi y en mi guitarra, me imagino un público y muchas ovaciones y empiezo a hacer mis movimientos, traste por traste, combinando escalas, haciendo las pausas debidas y tomando velocidad cada vez mas hasta que llegó al final de mi sólo.

No recuerdo en que momento cerré los ojos, y cuando los abro me encuentro a Diego, perdón don Arwin observándome y Brenda haciendo apuntes en su libro.

—Muy bien Mónica, has mejorado mucho, estas aprobada en la parte de solo, la próxima clase no puedes perderla, hablaremos de una nuevas escalas y técnicas, debes moderar tu velocidad, que tengas buen día y Adiós Aron un gusto conocerte.

Oh! esto si no me lo creo, la perra Brenda no fue tan perra después de todo, doy saltos de ganadora internamente y mi conciencia aplaude...

Creo que tendré que traer a Arwin conmigo mas seguido, o no...

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