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Óscar Reyes-Matute (*) / מתת

“Reloj no marques las horas / porque voy a enloquecer…”

Según un bolero de Roberto Cantoral...

Luego de publicar mi artículo “Un país, dos presidentes” (jueves 24 de enero de 2019), donde afirmé que Nicolás Maduro y su equipo iban a reaccionar como alcohólicos anónimos, a saber, tratando de sobrevivir un día a la vez (“no sé si voy a dejar el alcohol, mi problema es no beber hoy…”), un par de empresarios amigos me plantearon algunas inquietudes claves:

1.- El ultimátum que en ese momento había dado Maduro a la embajada de USA en Caracas para que salieran de nuestro territorio (3 días).

2.- El ultimátum de Europa a Maduro (8 días, es decir, hasta el sábado que viene), para que convoque a elecciones, so pena de reconocer a Guaidó.

3.- Las posibles reacciones de Padrino y el estamento militar ante la crisis.
Trataré de responder de manera razonada y argumentada a los planteamientos de mis amigos empresario, y los tuyos, lector, recordando algunos ejemplos de mis estudios sobre transiciones desde gobiernos autoritarios, cuando era investigador y profesor en la UCAB y participaba en el Observatorio Anti totalitario Hannah Arendt al lado del finado Heinz Sontag y mi tutor el Dr. Federico Welsch.

1.- LAPSOS

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Creo que la realidad ha probado que el gobierno (¿o ex–gobierno?) quiere sobrevivir día a día. Primero da un ultimátum de 3 días, que luego extiende a 30, más un addendum de 72 horas a partir de ese dead line, digamos para que los funcionarios consulares tengan tiempo de empacar y que consigan taxi y vuelo rumbo al aeropuerto Kennedy. Han mejorado: de sobrevivir un día a día pasan a 33 días.

Supongo que los asesores le juraron al gobierno frente a una maleta de dólares, que la situación –si la dejaban en sus manos- se iba a solucionar en tres días: metemos preso al auto-proclamado Presidente interino, reprimimos brutalmente las marchas, imponemos el estado de sitio, y listo. Visto que no se pudo, delante de dos maletas más les pueden haber jurado que en 30 días Guaidó se va a desgastar, y que podrán mantenerse en el poder… ¿O retornar?

En este momento, el gobierno que también es ex–gobierno (¡Viva la física cuántica!) está dándose cuenta de que los asesores los han engañado durante los años que duraron los reales, y que ahora no pueden confiar en ellos porque:

a.- No son capaces de predecir el futuro

b.- No tienen plan B

c.- No son fiables a la hora de una ruta de escape porque serían los primeros en entregar a El Alsami o a Cabello si Elliot Abrams publica carteles de búsqueda con recompensas de 1 millón de dólares por la captura de los (según Washington) ex–funcionarios forajidos. (Acuérdense de Montesinos y la lealtad venezolana)

Por otra parte, el lapso de 33 días no es vinculante para el gobierno de USA, porque no reconocen a Maduro sino a Guaidó. De manera que no es cierto que exista una oficina de mediación entre La Casa Blanca y Miraflores, todas las relaciones se están haciendo a través de Twitter, como se ve por ejemplo en la declaración del Primer Ministro de Israel Benjamín Netanyahu. Y las que no salen en Twitter es porque son cochinas y secretas y obviamente no se deben publicar.

Extender el plazo a 33 días implica un acto de fe de Maduro, la esperanza de que van a sobrevivir un mes, y que si Guaidó se equivoca tal vez puedan mantenerse en el poder.

Pero los opositores (que también son gobierno) tienen otro reloj, con otro huso horario. El primer lapso que les importa es el de 8 días de la UE, a partir del cual empiezan a reconocer a Guaidó como Presidente interino.

Es la razón por la cual no convocaron marchas durante la semana, sino un parón el miércoles, y que la marcha queda agendada para el sábado, en Las Mercedes, ante la embajada de la Unión Europea, justo el día en que se debate el apoyo a Guaidó. El huso horario los favorece: la sesión puede prolongarse en Bruselas todo el día, y aquí sería como hasta las dos de la tarde. Es como irse a Times Square a esperar el Año Nuevo, faltan 10, 9, 8, 7, 6… Happy New Government!

¿A quién beneficia la espera, independientemente del reloj o el lapso que se emplee para medir?

Creo que a Guaidó, porque para esperar hay que tener bastimento, y el gobierno ya no lo tiene, le quitaron el oro de Londres, las cuentas en USA, los royalties de CITGO (si es que los hubiera), y se los han transferido (sic), al gobierno de Guaidó.

Y en política, como señalaba Maquiavelo, interviene el talento, la virtú, pero también la fortuna, y Chávez y Maduro la tuvieron de su lado durante 20 años, pero el 23 de Enero se les acabó, y ha comenzado a soplar a favor de Guaidó.

De manera que nada permite presagiar que durante el lapso de tensión de 33 días que espera Maduro vaya a ocurrir un dato serendipity a favor de ellos, y contra Guaidó, sino todo lo contrario. Y no creo que haya macumba santera que cambie esa tendencia energética, ahora que se han metido los cabalistas judíos al ring. El santo se le ha volteao a Miraflores, porque hace rato no le sirven ron del bueno sino cocuy barato.

Mientras más tiempo pase, más defecciones veremos de parte de los antiguos aliados del ¿ex–gobierno?, empezando por China, que ha declarado que desea mediar en un proceso de paz, estabilización democrática, bla bla bla… lo cual quiere decir exactamente: “Nosotlos honolables capitalistas salvajes, tú pagal autobuses Yutong y teléfonos Huawey que me debes, y tola la plata que chinito plestó, o chinito alechal…”

China es la segunda potencia capitalista del mundo, y no cree en el socialismo. No olvidar que cuando Nixon le estrechó la mano a Mao, el anciano dirigente de la revolución le dijo: “Me gusta dialogar con la derecha, tienen más palabra que la izquierda, y son más confiables para hacer negocios…”

Esto me lo contó en un chiringuito de Chacao Miguel Ron, quien se ha leído la biografía de Kissinger 7 veces.

En cuanto a Rusia, es un capitalismo mafioso, y Putin tiene más en común con Trump que con Venezuela, y como negocios son negocios, siempre que les respeten los suyos, van a apoyar al que gane el pulso. A la ley de Amnistía política la seguiría seguramente una ley de amnistía económica. En principio, luego, no sabemos, ya veremos…

No sé si me he explicado, en esto de los lapsos y los pulsos.

Lo que sí les puedo decir es que en mi experiencia de estudio en cuanto a transiciones desde gobiernos autoritarios, no conozco un caso de un régimen que haya aguantado que le monten un gobierno paralelo, con el Presidente encargado paseando en moto por las calles de la capital, financiado con recursos de USA, con el apoyo de la UE, toda América Latina, el 80% de la población, y con la amenaza de represalias militares de parte de USA si los militares venezolanos disparan contra la población o contra los auto–juramentados. Tienen hasta canciller, embajador y agregado militar en Washington, TSJ en el exilio, AN jodiendo en Caracas, y el gobierno no se atreve (o ya no puede) encerrarlos en un corral, o en el estadio universitario. No es que no sean capaces de dar la orden, es que tienen el brazo mocho y no responde a lo que le manda el cerebro, es decir, nadie se quiere echar esos muertos encima.

2.- EL ULTIMATUM DE LA UE

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Creo que la posición de Pedro Sánchez, a los efectos de los intereses de Guaidó, fue impecable. De hecho lo reconoce en el momento en que lo llama por teléfono desde Davos, caminando por la nieve, y le expresa –seguramente- que tiene todo el deseo de reconocerlo, pero que en Europa, cuna de la hipocresía, hay que rendirles cierto culto a los izquierdistas enfermos de obsesión anti americana.

De manera que hay que hacer el aguaje y darle un lapso de 8 días a Maduro para que recapacite:

-Tú no te preocupes, tío, que Nico no va a convocar nada, y el sábado te reconocemos, ve preparando tu marcha para ese día. Al menos, nadie va a poder decir que no le dimos chance de salirse del peo.

Luego de ese reconocimiento y esa marcha, la mayoría opositora (¿o es nuevo gobierno?) va a salir fortalecida y moralizada, al ver que avanzó unas yardas más camino al touch–down.

En estos 8 días de lapso, los medios de comunicación digital juegan contra Maduro, porque no pasa nada a favor de Miraflores, y todo lo que ocurre o se ve favorece a Guaidó.

El gobierno rojo del PSUV está buscando al alargue del partido, el gobierno naranja de VP está buscando el gol de oro.

3.- LA FAN Y LA GEOPOLÍTICA

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Creo que este es el campo más interesante. Las fuerzas internas están más o menos equilibradas (60-40 a favor de Guaidó), porque los militares venezolanos no se han manifestado, como deben manifestarse los militares, a saber, no por Twitter sino con tanques y aviones. Se trata de un Presidente en Miraflores que corre el riesgo de ser desconocido por los comacates si intenta sacarlos a disparar contra el pueblo, versus un Presidente en la calle, en moto, repartiendo una ley de Amnistía.

El único cemento que mantiene unidos a estos militares en torno a Maduro es la ética de los negocios mafiosos que montó Chávez:

a.- Puedes robar todo lo que quieras, pero si intentas irte te jodo, tengo pruebas, te puedo liquidar en los tribunales, en un calabozo… Era el precio del dinero, de la riqueza, y los militares que están en la cúpula lo aceptaron. Los gringos tienen un viejo dicho que reza: “If you dance with the devil, you don’t change the devil, devil always changes you…” (Si bailas con el diablo no vas a cambiar al diablo, el diablo siempre te va a joder a ti…)

b.- Se han mantenido fieles estos años porque tienen miedo de perder sus negocios. Por ejemplo, el manejo de la compra y distribución de comida (CLAP) o incluso de los mercaditos callejeros que vemos en Caracas, cuyas verduras son traídas de los Andes. Los militares tienen un monopolio de dichos mercaditos. Eso para no hablar de los que tienen dinero afuera, de los que están vinculados con el narcotráfico, de los que son testaferros y socios de los civiles en altos cargos. “Va para ustedes también, hermanos militares corruptos, la ley de amnistía política y económica si se suman a la democracia, etc., etc., etc…” Hasta Padrino ha cambiado el discurso y reciente y sutilmente dijo: “No haremos nada que vaya contra la Constitución.”

c.- Pero esa ética que los mantuvo unidos en torno a Maduro ahora juega en contra. ¿Es capaz Maduro de garantizarles sus negocios? No. Y por eso están calculando cómo salvaguardar su riqueza, en una hipotética situación de cambio de gobierno. Si eso significa “respetar la Constitución” y saltar la talanquera, preparan la cámara para tomar la foto.

En una de las secuelas de El Silencio de los Inocentes, Hannibal Lecter por fin es capturado por su archi--enemigo en Sicilia, quien ha planeado darle de comer a sus cerdos salvajes la carne del psicópata caníbal. Un hastiado secuaz maneja la silla de ruedas del archi-enemigo de Lecter. Lecter recurre a sus habilidades como psiquiatra y le dice:

-Ese viejo loco te ha maltratado todos estos años, aprovecha y se lo echas a los cochinos, y de paso te quedas con todo el oro que tiene aquí en esta mansión. Total, me van a echar el muerto a mí…

El archienemigo, en la silla de ruedas, grita:

-¡No lo hagas!

El secuaz lo mira con odio, sonríe malévolo y empuja la silla, los cochinos se comen a su dueño, Lecter se escapa, y el jorobado que manejaba la silla de ruedas ahora es millonario. Esa es la ética de la mafia.

Así que creo que seguiremos viendo “defecciones democráticas” en el seno de las FAN, a medida que corra el reloj.

Otra cosa es la geopolítica. Ni China, ni Rusia, ni Cuba tienen capacidad para responder ante una intervención norteamericana en Venezuela. Además, los tiempos de la Guerra Fría pasaron. No Cold War but business, my friend…

Aparte de que quieren salvaguardar el dinero bien o mal habido, y de que Maduro ya no les puede garantizar esos negocios, los militares venezolanos tienen celulares, ven Twitter, y se mandan por Watssap los videítos y mensajes que circulan por la red.

¿A qué me refiero?

Bien, tú puedes colgar un video de Nicolás Maduro corriendo, montándose en un tanque de guerra destartalado, y mostrarlo en YouTube. Ese es un video oficial, preparado por Miraflores y La Habana.

Los norteamericanos cuelgan un video en el cual un viejo dirigente de Al Qaeda que tenía 15 años escondido sale a hablar en un púlpito, se oye un ruido, es un dron, el islamista voltea, se oye una ráfaga breve, y el yihadista cae fulminado de siete balazos. Ninguna otra persona sale herida. El dron desaparece.

¿Qué da más miedo? ¿Qué da realmente culillo?

No estoy hablando de la jodedera en las redes sociales.

Estoy hablando de los militares de verdad, que tienen mando de tropa. Esos militares venezolanos vieron el video, se lo mandaron entre ellos por los grupos de Watssap, lo discutieron en el estado mayor conjunto del casino, con Buchanan’s 12 años como aliño, y concluyeron el acta de la reunión con una de las muletillas favoritas del Libertador Simón Bolívar (según el maestro Cabrujas):

-¡La Pinga!

PD: TRUMP

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Una amigo mía judía, no diré el nombre, por supuesto, me señaló que la diferencia entre Obama y Trump es que el negrito es un perfecto demócrata pero medio pendejo, mientras que Trump es una rata, pero por eso se puede confiar en él, porque sabes que siempre se va a imponer en sus intereses, cueste lo que cueste. El asunto es descubrir cuáles son esos intereses y hacerlos coincidir con los tuyos.

Trump ha perdido mucho apoyo entre los latinos, por el asunto del muro en la frontera con México, algo en lo que ha fracasado, y ese fracaso tampoco debe haberle caído bien a sus votantes radicales, los red neck del midwest. El año que viene hay elecciones en USA. Florida y California (full de latinos) son dos estados decisivos. Trump no se ha estrenado con una guerrita, con una invasión, y no le caería mal perder la virginidad militar, digamos “liberar a Venezuela.” Hasta Alicia Machado votaría por él, y México, Colombia, Chile, Argentina, Brasil, Perú, Panamá, Ecuador, Dominicana, Madrid, Miami, Sidney, le agradecerían profundamente que les quitaran ese peo de encima, esos cientos de miles de inmigrantes venezolanos que tanto joden, y los millones que amenazan con seguir saliendo si el asunto Venezuela no se soluciona. Geopolítica y business, my friend.

Y Marco Rubio quiere competir con Trump. Por eso publicó su Tweet advirtiendo a los oficiales del SEBIM que midieran sus acciones contra Guaidó y la población, que no tienen idea ni están preparados para las represalias que USA llevaría a cabo si se vuelven locos.

Trump riposta nombrando a Elliot Abrams (Irán-Contra, Noriega, etc.) como el Jack Bauer de esta película. Abrams (Bauer) señala: “Ellos no van a negociar por ahora, van a querer negociar cuando tengan el agua al cuello, y para entonces, va a ser muy tarde…” Eso significa, muchachos del SEBIM, comacates y demás familiares y amigos: ríndanse ahora, que todavía están a tiempo.

¿Se van a inmolar los comacates por Maduro? No.

¿Entrarán los colectivos a los barrios a restaurar el viejo orden madurista? Lo han intentado, y los malandros de la zona los reciben a tiros y con granadas. Sus mamás están enfermas, y no consiguen remedios, no consiguen comida, no les llegan las cajas del CLAP, ya no pueden atracar a nadie porque nadie tiene real, y ya la inflación ha destruido el negocio de la venta de droga (ellos no son grandews distribuidores, son jíbaros de poca monta). De modo que, como se oyó en los audios de Cotiza, los malandros no van a prestar sus pistolas para robar celulares sino para echarle plomo a los colectivos y a quienes ellos considera que todavía son el gobierno. En esos enfrentamientos en los barrios se concentra el mayor número de los muertos de los días que han transcurrido desde el 23E, una treintena.

Ni los comunistas, ni los comacates, ni los colectivos, ni los cubanos, tienen temple de mártires. Los únicos carajos que yo conozco en el mundo que son capaces de inmolarse en un avión contra las Torres Gemelas, o a bordo de un carro bomba en Londres o Islamabad, son los fundamentalistas islámicos.

El día que vean un muyahedim en Caracas, ahí sí, corran… Mientras tanto, esperen a ver los acontecimientos, oyendo la canción de Cantoral :

-Reloj detén tu camino / porque mi vida se acaba…

No dudo que más de un coronel esté pensando en convertirse en héroe militar, y salir a declarar que reconoce como Presidente a Guaidó. Eso desataría una reacción en cadena, una especie de Black Friday político en la FAN.

Supongo que es lo que estaban fraguando detrás de los sucesos de Cotiza, y que esperaban pronunciamientos sucesivos, encadenados, que no llegaron a ocurrir, porque calcularon mal los tiempos (son militares, no políticos…). Si lo hubieran hecho después del 23 de Enero, otro habría sido el efecto. Pero nada indica que los autores de esa conjura no estén dormidos, camuflados, esperando el momento político militar exacto para explotar.

Así que, como le he dicho muchas veces a mi admirada y querida Carmen Alicia Di Pasquale:

-Puede ocurrir que un día te despiertes sin Chávez ni Maduro en el gobierno, y ni te enteres de cómo pasó.

Apreciados amigos: mi recomendación es que compren bonos de la deuda externa venezolana. Se van a revaluar (están subiendo) y tú ustedes empresarios saben muy bien lo que eso significa.
Pendientes de un buen almuerzo y unas cervezas para seguir con el análisis.

(*) Óscar Reyes-Matute es filósofo y guionista de cine y televisión