Cuando escuchas el nombre de Rebeca Mendez es probable que no te recuerda a nada en especial, pero cuando te mencionan a “La loca del muelle de San Blas” lo primero que se te viene a la mente es la canción de Mana del año 1997, una canción que se convirtió en un clásico de Pop-Rock en el Mundo.

La historia de esta mujer cuenta que tres días antes de su boda su amor llamado Manuel, en el mar, un miércoles 13 de octubre de 1971, ese día, la tormenta tropical Priscilla, en el Pacífico, pudo ser la causante de que “un amor que fue la gloria” se perdiera, y Rebeca, siendo adolescente, a sus 14 años, quedara trastornada.
Después de la tormenta asistía todos los días vestida de blanco al muelle con la esperanza de volver a ver a su prometido, como dice la canción.

Se dedicaba a tejer ropa para muñecas y a vender curiosidades en la plaza de la ciudad, se refugiaba en la casa de otro de los vendedores de la isla. Las personas le ofrecían comida ya que se compadecían de ella porque en dicha tormenta pudieron haber sufrido la pérdida de un ser querido.

“Ella conocía la canción de Maná y sabe que se la dedicaron a su historia, se emocionaba”, aseguró el narrador de la historia de Rebeca y dijo que a sus 63 años “estaba bonita, no era una viejita, era una persona entera y simpática”.

Aquí les dejo la letra de la canción:

Ella despidió a su amor
El partió en un barco
En el muelle de san blás
El juró que volvería
Y empapada en llanto ella juró que esperaría
Miles de lunas pasaron y siempre estaba en el muelle
Esperando
Muchas tardes se anidaron
Se anidaron en su pelo y en sus labios
Llevaba el mismo vestido y por si él volviera
No se fuera a equivocar los cangrejos le mordían
Su ropaje su tristeza y su ilusión
Y el tiempo escurrió y sus ojos se le llenaron
De amaneceres
Y del mar se enamoró
Y su cuerpo se enraizó
En el muelle
Sola, sola en el olvido
Sola, sola con su espíritu
Sola, con su amor el mar
Sola, en el muelle de san blás
Su cabello se blanqueó
Pero ningún barco
A su amor le devolvía
Y en el pueblo le decían
Le decían la loca
Del muelle de san blás
Una tarde de abril
La intentaron trasladar al manicomio
Nadie la pudo arrancar
Y del mar nunca jamás
La separaron
Sola, sola en el olvido
Sola, sola con su espíritu
Sola, con su amor el mar
Sola, en el muelle de san blás
Sola, sola en el olvido
Sola, sola con su espíritu
Sola, sola con el sol y el mar
Oh sola
Sola en el olvido
Sola, sola con su espíritu
Sola, con su amor el mar
Sola, en el muelle de san blás
Se quedó, se quedó sola, sola
Se quedó, se quedó
Con el sol y con el mar
Se quedó ahí se quedó hasta el fin
Se quedó ahí
Se quedó
En el muelle de san blás
Oh
Sola, sola se quedó
Oh

Articulo 1