Siempre Presente/Poema
Fuente
Un cigarro, hiere, destruye, destroza, remueve.
Con un cigarro lloras y desnudas el alma entre pensamientos malignos.
Un cigarro te envuelve en su oscuridad eterna.
Dilucidas con un cigarro en la mano.
Un café desgarra, enuncia remembranzas
Con un café materializas, impones tus fuerzas, tus deseos, tus ganas
Un café alivia las penas del alma.
El rico aroma del café, desprende adrenalinas del cuerpo.
El cigarro hiede y contagia la peste.
Todo lo próximo corrompe hasta su más mínima pureza
Seca las neuronas, cambia sus bellos colores y las deshidrata.
Un cigarro te odia, advierte, decreta
¡Malévolo cigarro que envenenas!
Arrebatas de las manos el amor
inocentes son víctimas de tu ira
Acabas con ellos sin compasión.
Gracias por leer.
Tiene tu poema una gran carga de nostalgia, le diste sentido a un reclamo ahogado de la vida.
Muy elegante amiga @belkisa758
Saludos cariñosos
Caramba, Belkis. Un texto con mucha fuerza. Tienes mucho arte para la prosa y para la poesía, qué bueno. Felicitaciones. Abrazos grandes.
Me sorprende la contundencia de tus palabras. Un poema que es un grito y un grito que es advertencia. Hermoso, gracias por compartir.
"El cigarro hiede y contagia la peste" totalmente de acuerdo, es un intruso, separa a la gente en el presente y en el futuro. Buena forma de drenar el dolor.