Venezuela Vs. El Titanic / Ya no sabremos que es o que fué peor... Mí país se hunde :c

MÁS DE VENEZUELA
ESTE ES HOY EN DIA, EL PAÍS DONDE EL SALARIO MÍNIMO NO ALCANZA PARA COMPRAR NI UN MÍNIMO DE ALIMENTOS, POR LO MENOS PARA SOLVENTAR LAS 3 COMIDAS DIARIAS.

El año pasado, una de las novedades fue la pérdida de peso que tuvo el venezolano, debido a la falta de alimentos (¡No es broma! Noticias, testimonios, simplemente ver a ese conocido de años que ya no es el mismo de antes, afirman lo que aquí expreso) Además, de que muchos de nuestros vecinos, y hablo de estados, pueblos, campos… sí, muchos de nuestros vecinos debieron omitir o saltarse comidas. Ya no se tiene el derecho de desayunar, almorzar y cenar, muchísimo menos “Merendar”. Y si les hablo de “CENA NAVIDEÑA” ¿Qué les digo? Hasta eso fue casi un reto cumplir este fin de año, perdiéndose un poquito la realización de las tradiciones que anualmente con tanta alegría el hermano venezolano espera.

Hoy más que otros días me pesa la situación de mi país, hoy más que nunca me siento triste y deprimida viendo como mi país se viene abajo totalmente. Las calles se perciben silenciosas, los ánimos se sienten abatidos, los rostros de nuestro prójimo se ven desesperanzados y agotados de tanto luchar, y es que el nuevo año inició con la escasez de comida y el aumento en los precios que se han derivado en consecuencias preocupantes.

Con el nuevo “Aumento salarial” la crisis alimentaria en VENEZUELA se ha profundizado a medida que, yo, como habitante del mismo afirmo que nuestro país se hunde en el caos. Si bien dicen por ahí que el cielo es el límite, HOY de forma negativa Venezuela, con los precios de la comida lo está alcanzando, capaz y hasta sobrepasando. Un salario mínimo NO es suficiente para suplir las necesidades BÁSICAS.

De frente y sin frenos, obligados y casi sin fuerzas, nos enfrentamos a la escasez de alimentos, de artículos de aseo personal, de medicinas, porque estos no se consiguen, y bueno si se consiguen, así como los llaman “Bachaqueados” los precios de los pocos productos disponibles están por los cielos. Hoy nos enfrentamos a anaqueles totalmente vacíos en los supermercados, llevando a familias a hundirse en la desesperación, porque ahora deben pensar con mayor énfasis en que dar de comer a sus hijos.

Mi esperanza ahora que regresé de pasar mis “vacaciones” con mi familia en mi pueblo, pasaron de ser inmensas a ser un pequeño rayito de luz, que en lugar de crecer, disminuye y disminuye, y me hace pasar noches pensando y pensado en QUÉ VAMOS HACER, HASTA CUÁNDO. Solo deseo con todo el corazón que este nuevo año 2018, sea un año decisivo, que dejemos la competencia con el Titanic, y podamos salir de esta.

VENEZUELA TIENE QUE VOLVER A SER LO DE ANTES!
Dios ha de escuchar nuestras súplicas!

Feliz noche :C