Historias cortas: La Luna del Cazador

Muy buenos días/tardes/noches o madrugadas señoras, señoritas, caballeros, y otras especies Steemitas!

Aquí les traigo la primera parte o capitulo de La luna del cazador, una serie de escritos que he estado desarrollando desde hace varios años y que, aunque esta muy muy verde, he querido compartir con ustedes para que comenten que tal y así mejorar y aprender más en este mundo de la escritura de genero ficticio/fantástico (aunque en el prologo he dicho que va de terror/suspenso, pero es que he agregado un poquitirijillo de cada cosa).

Así pues, les dejo este corto primer capitulo por aquí esperando que sea de su agrado y que lo disfruten como yo lo he hecho (y en el camino pos unos votos no caen nada mal jejejeje).

Luna Roja

                                                              

                                                           1. El Rastreador

 El rastreador miraba con atención el suelo de la parte trasera de la casa a la luz del mediodía, buscando huellas o señales de huida; no había conseguido nada.  

Llevaba registrando cada rincón de la casa y sus exteriores desde la noche anterior. Las tripas le  gruñían, los ojos ardían de cansancio. Llevaba varios días sin dormir bien, producto de unos ataques insomnio que le acosaban.  Antes de contratarle, los padres de Emily habían acudido a la policía local, los cuales comenzaron las tareas de búsqueda e investigación casi de inmediato, pero luego de dos días sin hallar ni una pista solida, comenzaron a desesperar.  

 Héctor Mathers no pertenecía a cuerpo de policía de Bella Vista, pueblo olvidado en algún punto al norte de américa, pero se había labrado una buena reputación trabajando junto a los oficiales en ocasiones anteriores como buscador y rastreador en los espesos bosques de la zona. En el ámbito privado, se ganaba la vida como cazador, vendiendo sus presas, pieles y alguna otra cosa que consiguiese en sus cacerías, por lo cual, como rastreador, su experiencia era indiscutible.  

Fue idea de una de las tías de la niña el contratar al rastreador para que, de forma extra oficial, ayudase en la búsqueda de la pequeña «secuestrada», como afirmaban sus padres.

Al principio, se negó con el pretexto de que la policía le pediría ayuda si lo consideraba oportuno, pero luego de escuchar la versión de los hechos de boca del padre, aceptó casi de inmediato.  

«Sé de lo que habla, pero es mejor para usted permanecer en la ignorancia» pensó el rastreador cuando escuchó el relato y luego de hacer unas cuantas preguntas aparentemente superficiales.

 Héctor escrutaba por décima vez el patio, cada metro cuadrado de césped podado, cada listón de madera de la valla, cada detalle del borde del techo inclinado y lleno de tejas, el árbol sin hojas junto a la ventana... el Árbol. Se acercó al deshojado y seco tronco, mirando con mucho cuidado. Trepó hasta una rama alta, se balanceó hábilmente hasta donde chocaba con las tejas del techo, miró hacia atrás.  

«Un escurridizo hijdeputa»  

Bajó de un salto, cayendo en perfecto equilibrio sobre el césped, se enderezó y echó a andar hacia la casa; entró por la puerta trasera.  Los padres de Emily salieron a su encuentro, con aquella mirada que demostraba esperanza; Héctor no les diría nunca la verdad.  

-Sé hacia donde se han llevado a la pequeña- declaró.  

La madre se apretó contra su marido, visiblemente emocionada ante la declaración del rastreador.  

-Avisen a la policía-

  
Héctor dio media vuelta, le detuvo una mano en su hombro, era el padre de Emily.

-¿Estás seguro de esto? ¿Iras delante tu sólo?-  

-Si- declaró, liberándose de la mano del hombre y encaminándose nuevamente hacia la parte trasera de la casa.  Saltó la valla y comenzó a trotar, debía alcanzar los bosques antes de que el sol cayese... o seria demasiado tarde.  

Nadie en el pueblo le volvió a ver desde entonces. 

 

 Hasta aquí este primer capitulo, espero les guste y espero leer sus comentarios (tengan piedad, que estoy comenzandito en este mundo)

 Agradezco a mi pana @carlosaka, por el cual llegue hasta este rincón del Internet, a las comunidades @cervantes y @mosqueteros por su trabajo, apoyo e impulso para los Steemitas de habla hispana como yo y a ustedes, queridos lectores, por regalarme un minuto de su tiempo al leer estas lineas que con cariño les dejo.

 ¡Hasta la próxima!