Si acabas de llegar a mi perfil por casualidad, porque te lo han recomendado o porque quieres ser más productivo, dejame decirte que has llegado al lugar perfecto, aquí tienes ideas y recursos para conseguirlo y hoy le sumamos una herramienta que lo amalgama todo, el educarte para la felicidad.

Así que no nos quedemos con la incógnita, te invito a conversar conmigo sobre este libro en construcción que tengo para ti, no sin antes invitarte a que te sientes conmigo y así ofrecerte tu bebida favorita, ¿adivina qué?, ya yo tengo preparado mi café y también estoy lista para compartir contigo una grata conversación.

Aquí encontrarás una oportunidad para reconectarte con tu sentir, en un lenguaje sencillo y ameno que enlaza el conocimiento, con la fe en ti mismo y el desarrollo de metas alcanzables para tu felicidad influyendo en tu autogestión eficaz.

Hablar de la felicidad en estos tiempos de turbulencia puede resultar complejo, y más, cuando existen diversos factores que influyen en la infelicidad como la depresión que según la OMS calcula que más de trescientos (300) millones de personas en el mundo poseen este trastorno mental, siendo la principal causa mundial de discapacidad y en el peor de los casos la depresión puede llevar al suicidio; a esto se le suma el drama social y lo podemos evidenciar diariamente en lo titulares de periódicos y demás medios de comunicación.

Vamos a detenernos un instante y pensar que si se puede, que a pesar de tu situación actual, tus creencias y tu pasado puedes Educarte para Ser Feliz, conectándote con las herramientas que pongo a disposición para ti en este libro que pieza a pieza se ira construyendo ante tus ojos.

Mi invitación es que descubras como la felicidad ha sido objeto de estudio y preocupación, siendo difícil de enmarcar en una definición absoluta, pero con tantas las posibilidades de que puedas palparla en cualquier momento de tu vida, siempre y cuando exista la honesta disposición de tu parte en ir a su encuentro. De allí pues que, comprendas que la limitación para la felicidad sólo existe en ti, en tu modo de vivir y en tu propio parecer.