Concurso de cuentos #fotocuento - Semana 9: Contar gotas.

in #castellano6 years ago (edited)


Imagen cortesía de @rahesi


Contar gotas


Llovía fuerte hacía ya varios días. Habían cortado algunas carreteras y la asistencia al colegio fue suspendida hasta nuevo aviso. Darío permanecía sentado junto a la ventana del salón de casa. Trataba de contar las gotas. No era nada fácil, ya había perdido la cuenta infinidad de veces.

   - Doscientas treinta y uno, doscientas treinta y dos, doscientas treinta... -oyó la puerta de casa cerrarse, alguien había llegado- ... doscientas treinta...

Tendría que volver a empezar.

   - Ven un momento cariño. -la voz de su madre se camuflaba entre el monótono y relajante sonido del golpear acuoso.

Desde que tenía memoria habían estado de aquí para allá. Ella y él, nadie más. Había escuchado historias en clase, se burlaban de él hablando de su madre; pero Darío nunca hacía caso. No importaba lo que dijeran: su madre era su madre, la quería infinito y siempre cuidaba de él. Ya llevaban un tiempo en esta nueva casa, incluso era posible que este curso lo acabara en el mismo centro donde lo comenzó. Cuando llegó a la cocina vio a un señor muy alto acompañando a su mamá. Permanecía de pie, junto a la puerta del lavadero, mirándolo. Aquel hombre le provocó una sensación muy extraña, como si un punzón retráctil hubiera sido alojado en su pecho y alguien intentara sacarlo tirando de él. El hombre permanecía ahí, sin decir ni una palabra.

   - Cariño, mamá tiene que salir un rato con este señor. No volveré muy tarde, ¿de acuerdo? Ha venido a buscarme desde muy lejos y sólo... haremos unos recados y volveré. -el niño, sin pronunciar palabra alguna, devolvió a aquel tipo la mirada- Cariño, mírame. ¿Me oyes? No tardaré mucho. Pórtate bien. No te preocupes por nada. Tienes algo de tortilla en el microondas. Cómela.

Besó su frente, cogió las llaves, el bolso y se fueron. Quizá estaría solo varios días, aunque con algo de suerte su madre volvería al día siguiente. En el colegio, los otros niños decían muchas cosas feas sobre ella, pero Darío nunca hacía caso. En cualquier caso, tampoco le gustaban los señores con los que salía mamá. Ni siquiera eran simpáticos, no aprendía sus nombres, ni recordaba sus caras...

Se habían ido. Quizá ahora nada ni nadie volverían a interrumpirlo. Volvió a la ventana, le gustaba contar las gotas de la lluvia. No era una tarea fácil. Una, dos, tres, cuatro...  


Fin.

Si tú también quieres participar puedes ver las bases de este concurso organizado por @rahesi.

¿Conoces @autovoters?

 

Posted from my blog with SteemPress : http://salvao.vornix.blog/concurso-de-cuentos-fotocuento-semana-9-contar-gotas/
Sort:  

De verdad que esto de leer estas publicaciones @salvao me tienen con el alma en un hilo, hermoso me encanto mucho.Es un libro tantas historias hermosa, me enamora todo esto. Hasta la próxima inspiración. Que bueno que aprendí a leer.

Anda que no! Ahora a disfrutar las lecturas ;)

Un maravilloso relato, redondo, sintético y a la vez muy sustancioso como para traer evocaciones de la niñez aunque no sean las mismas circunstancias...y afortunadamente no sea la misma madre de Darío. Un abrazo @salvao y lo mejor para ti.

Sí, afortunadamente... Muchas gracias @humoalex por pasar a leer. Me alegro de que te guste! A ver qué tal se da el concurso. Es la primera vez que paso por el fotocuento, mañana leeré otras participaciones.
Abrazo de vuelta!

Buen relato amigo. Para un niño su madre sera siempre una reina.

Normalmente sí, haga lo que haga y sea quien sea.

Saludos @salvao. Excelente cuento, quien de niño no quiso contar las gotas de lluvia que caían en su ventana, así como contar las entradas y más.... Éxitos en el concurso.

Muchas gracias! En cualquier caso esto no es autobiográfico jajajaja.

Cuando niños, tendemos a aislarnos del mundo para no sufrir las penas. Yo, volaba sobre las nubes y me quedaba dormido sobre una de ellas; en tu relato, el niño encontró su refugio en la sutileza de una gota. Prosperidad y bendiciones.

Así es, este Darío escapa como mejor puede, y ama a su madre. Un saludo!

Me encantó, amigo tiene de tu magia, saludos

Y a mí me encanta cuando me dices esas cosas :) Un saludo.

@salvao, este relato es conmovedor y la mirada infantil le agrega otra dimensión, más terrible.
Muy bueno.

Muchas gracias Adriana, acuérdate de darme los detalles de aquello!

Tu personaje principal es mi favorito hasta ahora de todos los del concurso. Me gustó mucho tu historia. Me hizo sumergirme en la mente del niño. Y esa es una de las maravillas de la escritura (de la buena escritura): el lograr que te sientas identificado e involucrado con alguien cuyas experiencias son completamente ajenas a las tuyas.
Saludos!

Vaya, qué honor! Me alegro de que mi relato te provocara esas reacciones. Un saludazo!

Que bello cuento. Cuánto dicho, sin decir.
Una genial forma de evasión y ¡concentrándose!
Suerte, amigo.

ah, no he dicho a qué se dedicaba esa madre?? :D

En demasía, pero con finura, sin decirlo.
Así como las soledades, los miedos sin tener a quien acudir, la falta de atención en las necesidades básicas, etc, etc.
La evasión como recurso, el aislamento.
Todo dicho mediante ese discurso sugerente, con unas cuantas circunstancias expresas.
Un abrazo

Cuando los niños entendemos el sufrimiento, solemos encerrarnos en nuestro mundo. Encantador relato @salvao, gracias por participar :)

De nada, de nada. Para mí ha sido un placer escribir para este concurso. Lo raro que no me hubiera presentado antes. Pero bueno, ¡vendrán más!

Coin Marketplace

STEEM 0.28
TRX 0.11
JST 0.034
BTC 66540.93
ETH 3186.50
USDT 1.00
SBD 4.11