Últimos Días

Me duelen las rodillas, así como me duele el corazón, un poco parecido a como se siente mis esperanzas pero nada comparado como esta mi soledad. No he dormido bien en los últimos días y tal vez se deba al hecho de no estar a gusto con mis últimos días, mis últimos días parecen vagos y carecen de emoción alguna parte de la sensación de ausencia de la felicidad y el recuerdo roto de como luce mi sonrisa.

He olvidado mi rostro y mi voz suena diferente cada día, me suenan los huesos al moverme como si estuviese a punto de desmoronarme y mi estomago ya no siente hambre. Me quedo sentado en mi cabeza aunque me mantenga acostado en mi cuerpo, solo para pensar como es posible no sentir mi propio aliento, debe ser un síntoma de los últimos días, mis últimos días.

Los días abundan de colores pero los últimos carecen de ellos, quizás para no dejar de ser los últimos, quizás por estar cansados, pueden que tengan hambre o puede que quieran cagar, síntomas de los últimos días.

La voz me cuenta que pueden haber más días pero ya estoy cansado, mis rodillas duelen y mi corazón se lamenta, mis esperanzas tosen y mi soledad ya ni existe, incluso ella me abandonó aunque supiera que eso la haría quedarse conmigo para siempre, para toda la vida o al menos para los últimos días.

Hoy regreso con un escrito de mi mente, sin utilizar alguna palabra clave como antes o alguna situación, espero de corazón que les haya gustado y si tienen algún consejo para mí para mejorar, pueden dejarlo en los comentarios y los leeré amablemente, nos leemos luego mis queridos lectores.