Hoy desperté pensando en una palabra ¡HUMANIDAD!

Como sabrán soy venezolano, tengo cincuenta y dos años los cuales he aprovechado al máximo. a lo largo de mi vida he acumulado experiencias y visto de todo, conozco gran parte de mi país, podría decirse que conozco gran parte de su gente. Crecí viendo un país próspero pujante, lleno de oportunidades ¡RICO! donde existía la generosidad lugar en el cual tus padres te enseñaban valores, principios, respeto y a ser humanitario con tu prójimo.(al menos a mí me lo enseñaron mis padres).

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Recuerdo en mi escuela, mis maestras, (porque todas fueron mujeres), me enseñaron a compartir y respetar a mis compañeros de clases a ser unidos, trabajar en grupo. No me puedo quejar de mi educación, ya que fue completa podría decirse que hasta divertida.

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El punto al cual quiero llegar y motivo de este tema, es que observo con suma preocupación pero sobre todo con temor e indignación la falta de humanidad que hemos perdido hacia nuestros congéneres. La cultura de ser generosos, amables, respetuosos y solidarios se está perdiendo, o peor se ha perdido ya.

Mi pregunta es ¿hasta qué punto el venezolano ha perdido la humanidad, el respeto y el amor hacia su prójimo? hoy por hoy me llena de pena ver personas, sin el más remoto conocimiento de la palabra compasión. Con esto no quiero decir, que todos los venezolanos hemos llegado a este punto de DESHUMANIZARNOS, de perder la compasión y el respeto hacia el otro , veo con tristeza la gran cantidad de personas en mi país que no les importa. Es más creo sin temor a equivocarme que disfrutan con un gusto sádico hacer el mal y pasar por encima de las personas jugar con el hambre y la desesperación de sus hermanos. Ejemplos tengo muchos creo que escribiría un libro, pero voy a citar solo algunos.

Solo el pensar de hacer una fila en un auto mercado, kilométrica y que solo los que comercian con la comida en el mercado negro, son los únicos que pueden comprar y luego de haber hecho esta fila te digan ¡todo se acabó! para que después el que compro te lo venda al triple del precio inicial y tú por necesidad tengas que comprárselo sin que te quede ni siquiera para el pasaje.

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No solo eso, para colmo si no tienes completo el dinero, no te lo venden y la persona queda de nuevo con las manos vacías llegando a su hogar desalentado y humillado. Ni hablar de ciertos comerciantes sin escrúpulos, sabemos que hay crisis en Venezuela no es falso, pero conozco a muchos dueños de negocios los cuales revenden los alimentos que comercian al más del mil por ciento de su precio. sabemos que sí, que hay que obtener una ganancia tienes que mantener tu familia y tu negocio pero por favor, pensemos un poco tenemos que partirle el brazo al prójimo para eso, de verdad no lo creo.

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Ni hablar de nuestros cuerpos de seguridad, estos personajes que deberían velar por la seguridad y protección del ciudadano de garantizar que por el motivo de la crisis podamos obtener el alimento y la protección al más necesitado… ¡increíble ¡protegen y velan por la seguridad del que especula, ¡ si! se encuentran en las filas de auto mercados, comercios y en cualquier lugar donde se comercie con alimentos y medicinas, son los primeros en llevarse lo que en ese momento se esté comerciando ¡a claro y sin pagar! pensamos que nos protegerán ¡pero sorpresa! protegen al que se lleva la mercancía para revenderla díganme¿ esto no es falta de humanidad? no encuentro otra palabra para eso, podría también hablar del ciudadano de a pie, este será el tema para otro post.

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Dirán bueno esto es algo de lo mismo ya sabemos lo que pasa en Venezuela. para que seguir con esto es un tema trillado, pero la idea es, que veamos la falta de humanidad a donde hemos llegado, solo quiero aportar un grano de arena para educarnos y retomar el camino humano, volver a ese camino de reconciliación, solidaridad, generosidad, valores y principios que tanta falta nos hacen en estos momentos tan oscuros de nuestro país.

Mi madre me enseño que el amor la compasión y respeto, se aprendían en el seno familiar, que todo partía desde ahí desde la familia. Qué la familia era, es la base fundamental de toda sociedad.

Eh notado con tristeza el deterioro familiar del venezolano, por su puesto no estoy hablando de todas las familias, ya que todavía existen padres responsables llenos de amor que enseñan a sus hijos valores y principios.
Por otro lado con gran tristeza tengo que decir que existen padres en este país que se les olvido, tal vez nunca aprendieron la manera de, educar o criar a sus hijos; de educarlos para el respeto, el amor y la generosidad en pocas palabras a ser humano. Esta nueva generación de padres no sabe o no les importa en que forma crecen sus hijos, la mediocridad reina en estos hogares, (repito mi intención no es criticar), podría decirse que quiero o al menos tratar que entremos en razón).

Tal vez nos falta conciencia, hoy por hoy vemos padres que no les importa él comportamiento de sus hijos, los dejan hacer lo que le venga en gana, si el niño hace una rabieta, si dice groserías no les enseñan ¡Para ellos es una gracia! dicen ¡hay que bello ,su primera grosería!

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Hace unos días observe una pareja ,tenían como tres hijos el más pequeño lloraba y lloraba, no paraba se tiraba en el suelo decía unas groserías que para que les cuento. de repente, el papa le dice basta, ya tranquilízate él bebe le ha cargado una cachetada de película, pensé ahora si ¡el padre va a reprenderlo! al menos le va enseñar que eso no se hace, para mi sorpresa no fue así, el padre solo lo tomo y le ha llenado de besos, entiéndase no estoy en desacuerdo con esto solo que hay tiempo de todo, creo que ese no era el momento para besos, era el momento preciso para enseñarlo a respetar, pero no podemos meternos en eso ¿verdad?.

También hay casos donde el niño llega a casa con algún objeto, o prenda que no le pertenece. Llega con dicho objeto y que hace el padre o la madre les acepta lo llevado, sin investigar de donde viene dicho objeto, si se lo regalaron lo obtuvo trabajando etc. Solo lo aceptan, y ya sin saber cómo lo obtuvo. Recuerdo cuando estaba en la escuela, encontraba un lápiz o cualquier cosa y lo llevaba a casa, mi madre tenía la costumbre de revisarme las labores escolares a ver que tenía pendiente, si por casualidad tenía algo que no era de su inventario, comenzaba a cuestionarme a indagar de donde había sacado tal objeto.

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Le respondía ¡no mama me lo encontré en el piso! y me decía ¡preguntaste de quien era! si por casualidad tu respuesta era negativa , a prepararse pues tenías una reprimenda tremenda, pero antes comenzaba el consejo decía, que te he dicho cuando encuentres algo, si hay personas cerca pregunta de quién es puede que el dueño este ahí presente. Cualquier cosa que yo llevara a casa desde un carrito, moneda lo que sea que no pudiera comprobar que me la había dado un familiar, o lo había ganado en buena forma era motivo de castigo y consejo de parte de mi madre.

Sus palabras retumban en mi mente, tal cual como si fuera hoy ¡hijo en esta casa está prohibido traer cosas que no son tuyas, usted tiene que respetar lo ajeno, nada que usted no se haya ganado y yo no compruebe que sea así, será aceptado aquí! este consejo me ha servido toda la vida.

Hoy por hoy tenemos que retomar esta clase de educación, tome como ejemplo estas historias para dar a entender a qué grado han llegado los valores y principios de algunos padres venezolanos.

Ya hemos perdido el concepto de respeto, amor y valores. Esto nos lleva a la falta de humanidad por nuestro prójimo, la cultura que hoy se enseña en nuestro país es de odio irrespeto y antivalores, los niños no aprenden a amar y los padres colaboran con esto.

Si tan solo entendiéramos que todo comienza con la familia, qué como padres estamos en la obligación de inculcar amor, respeto, generosidad y compasión por nosotros mismos por la sociedad, el entorno donde residimos, tendríamos un país diferente a pesar de la crisis política y humanitaria que hoy vivimos. Seriamos más unidos más humanos, solo entonces comprenderíamos que solo en familia podríamos salir de este hoyo oscuro, donde nos encontramos en este momento.

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Quiero terminar diciendo ,solo enseñando a nuestro hijos ,el valor del amor, el respeto la comprensión la generosidad la compasión, educándolos a ser buenos ciudadanos, hijos, padres, hermanos y amigos solo comprendiendo estos valores y principios y por su puesto nosotros como padres tengamos la iniciativa de aprender más, para llevar a nuestros hijos por la senda de la rectitud y las buenas costumbres.

En ese mismo instante comprenderemos, qué nuestro país cambiara y la humanidad entera entrara en ese cambio y dejaremos de ver tanta decidía, corrupción, maldad ,injusticia, delitos y falta de humanidad hacia nosotros mismo y nuestra nación.