Concurso Cartas al Viento, Semana #2/Eres el consuelo a mi añoranza

Te descubrí una noche bajo el embrujo del carnaval, entonces pensé que eras un pueblo frívolo y divertido donde máscaras y luces cegaban la realidad que se escondía bajo tu piel y te sentí vacío.

Luego volví, y tu luz me llenó de vitalidad. Con el tiempo te fui descubriendo y simplemente me enamoraste.

Sitges, te escribo a ti esta carta a través del viento. Encuentro tantos atributos en tu naturaleza que resulta un tanto difícil enumerarlos cuando siento que son parte de tu idiosincrasia.

Desde tiempos inmemoriales dejaste huellas para que no te olvidaran y hoy eres un fiel representante de antiguas culturas descubiertas bajo tus huesos allá en lo más profundo mostrando tus ancestrales raíces romanas.

Me gusta pasear sobre tu arena fresca y disfrutar de los azules profundos del Mediterráneo, así mientras me deleito en tus atardeceres que me recuerdan a mi amada tierra. Es entonces cuando siento esa unión que me mantiene cuerda bajo el mismo cielo y el mismo mar que me espera un poco más allá de tus olas.

Eres tan pequeño que me impresiona que puedas contener cuatro museos en tus brazos con los que atraes a los visitantes ofreciendo cultura y belleza. Tus calles están sembradas de esculturas y la historia convive con las fiestas del pueblo y los festivales internacionales de cine. Primero cosmopolita y luego provinciano con la vendimia y su néctar de malvasía, las celebraciones religiosas de Santa Tecla y de San Bartolomé así cómo la fiesta del Mar de nuestra Sra. del Carmen. En junio Sitges se engalana de flores para celebrar Corpus Christi dibujando paisajes soñados con pétalos de flores que las manos inocentes de los niños se encargan de colocar como pinceladas.
Descubrí siembras de claveles de las variedades más exóticas. Geranios colgando de los balcones románticos en las estrellas callecitas que se disputan año a año el premio al mejor balcón.

Así me cautivaste. Cada día descubres algo nuevo para mi y lo siento como una caricia de consuelo a mi añoranza.

Hasta tu clima es un atractivo más para los europeos del norte que ven en este lugar sol y luz la mayor parte del año.

Por eso y por abrir las puertas a todos, por no juzgar clases ni condición, por respetar la dignidad de todos, te aplaudo y te envío esta carta a través del viento.
Agradezco tus puertas abiertas y el cobijo que recibo de ti.

Por siempre

Estoy participando en el concurso «Cartas al Viento», aqui podéis encontrar el enlace.

Las fotografías pertenecen a la población de Sitges-Barcelona-España. Son de mi propiedad y fueron tomadas por mí.