Cómo es que una fotógrafa termina cantando en las calles de latinoamérica.

Alejandra Navarro es una chica venezolana que sale a viajar por latinoamérica con un par de amigas que tenían un dúo musical y al que ella documentaría a lo largo del viaje. Pero la situación política de Venezuela, la situación económica de ellas en Colombia y diferencias creativas, las hicieron tomar la decisión de seguir cada una su camino.
Después de muchas vicisitudes a lo largo del viaje, varias exposiciones fotográficas, talleres de foto móvil/creativa, varios intentos de canto grupal y nada de dinero, Alejandra decide seguir el viaje cantando, así sea sola. Luego de continuar adelante con la música, haber seguido su viaje por Colombia, Ecuador y Perú, se queda en este último país, específicamente en la Ciudad de Arequipa por tiempo indefinido, ofreciendo así, sus servicios como intérprete musical, no sólo de Boleros, sino también de Vals, un poco de Rancheras, algo de Música Criolla (peruana) y Música Llanera (de Venezuela)

Bien. Definitivamente, esa es la "definición" corta de lo que han significado estos 4 años fuera de casa, lejos de mi gente y en esta universidad de la vida, en donde el aprendizaje está en cada respiro, en cada paso que damos.

Ya sin hablar en 3ra persona, sin hablar por los demás, me presento.

Yo soy Alejandra Navarro alias "Gato" sí, me hice llamar así por mucho tiempo y aún honro mi nombre dado que es el mismo que le dí a mi "firma" de fotografía, que es a lo que me dedicaba antes de ir por ahí cantando para seguir el viaje.
Estudié Publicidad, Locución, Fotografía, Producción en Tv y Cine y Medios Audiovisuales, que abarca más o menos todo lo anterior. Vale, de unas me gradué y la última no la pude concluir, entre otras cosas porque me fui del país y me dediqué a viajar.

No ha sido fácil, pero no lo cambiaría por volver al "confort" de lo conocido; en este viaje he aprendido -me atrevo a decir-, mucho más de lo que viví estudiando todas esas carreras, por el simple hecho que volverte "artista de calle" requiere un compromiso mayor a medida que pasa el tiempo y la verdad yo no me había planteado vivir de la música, ni seguir viajando así, pero intenté hacerlo con la foto y fue todo un poco más complicado...

Logré montar 3 exposiciones fotográficas en Colombia, sin mucho renombre o éxito en general, pero para mí significaron mucho, aprendí y seguí adelante llegando a Ecuador a presentar un taller para los más pequeños de la casa, con la premisa de que los niños "ya nacen con un celular en la mano" entonces pensé que le dieran un uso productiva a su ya intuitiva forma de retratar el mundo cada vez que se les habla de hacer una fotografía.

Fue un éxito, pero por no escoger unas buenas fechas, la segunda vez se tuvo que posponer y ahí me desanimé bastante, se me estaba acabando todo el dinero que había ahorrado hasta el momento.

Entonces sigo el viaje y me uno, con quien sería no solo el compañero de esos días, sino el acompañante de todos mis días hasta hoy. Unimos fuerzas y viajando juntos nos complementamos en todo a lo que nos dedicábamos, pero vivimos un momento de crisis cuando se me fue arrebatada mi cámara y eso me impulsó a dedicarme más al canto y a la escena en la calle y luego como performance para contrataciones profesionales.

Con el tiempo y ya radicando un tiempo más largo en Perú, me di a conocer más por cantar en la calle que por vender mis fotos postales que siempre llevaba conmigo. Entonces cuando se vinieron esas presentaciones más serias, pensé en hacerme de un nombre, de un "nickname" que fuera fácil y que tuviera que ver con lo que hacía, porque mi apodo era "Gato" y eso, pues, nada que ver.

Así me hice llamar "La chica de los Boleros" era cómico, pero era lo que era, era lo que hacía, una chica que canta boleros... En fin, empecé a obtener más contratos y cantar en varios lugares de los que tristemente no tengo memoria fotográfica (por mi ya comentado incidente) pero hay algunos vídeos de aquellos momentos, que subí en la plataforma de Instagram, Facebook y Youtube.

Que con tanto contrato la gente quería saber de mí, así que prácticamente todo me llevó a unirme a las redes sociales, ya de una manera más comercial y es lo que me trae también por estos lares.

Al seguir viajando, pasamos por Bolivia, Uruguay y tantos lugares en donde siento, dejé una huella y ganas de volver. Ahora con la mirada en alto y en el país de Brasil, me sigo instruyendo y curtiendo de ciudad, de cultura y de mucha gente que apoya y valora lo que hago. Gracias a estas personas he podido continuar mi viaje, ayudar a mi familia en Venezuela y por supuesto mantenerme día a día.

Pero lo que no he podido hacer en todo este tiempo es ahorrar o tener al menos un fondo, una reserva con la que contar para hacer todos los proyectos que tengo en mente. Si me sigues, te quedas conmigo un rato, escuchando buena música, viendo vídeos y parte de mi historia para lograr esto que tengo, tenemos en mente, sabrás de lo que hablo y quién quita, quizá quieras formar parte!

Saludos a Toda la Comunidad Steemit, escucho, leo, valoro cualquier recomendación que me quieran dar para mi mejor rendimiento y aporte a esta plataforma!