Y  a  veces no te  sentabas en  la  noche.

Esta elección no da paz.
Que pocos son los que dicen que estoy listo
Cuantas personas dicen la hora
Pero que hay aqui
Ella no se consideraba solitaria...

Soy lo mismo que quemaste en mi corazón,
Cabaña de troncos de la casa corta.
Dios es amor y esto también.
En un cuarto tapado, encerrado.
Día tras día, levantarse por la mañana.

Para divertirse y caminar.
Para el reptil bastardo, año tras año.
Que yo ni amor ni amistad sea necesario.
¡Mi tren se apresuró!
Color de la caída de la estrella todo el cielo.

¿Tiemblan las ventanas tan fácil?
Es una pena que Nietzsche no estuviera aquí conmigo.
Y todo cubierto de nieve.
Y ahora que...
Le das miedo a los débiles al gusto.

Y el destino duerme inocentemente,
Presión en la garganta, no te permite respirar.
Y ella grita el bisel de felicidad
Y quemado con anhelo
Ni siquiera puedes desmoronarte.

Alma nos esforzamos por la voluntad.
¿Despertar en otras ciudades?
Y es posible alegrar cualquier día gris,
Y comienza la ocupación del intelecto.
Para que los sentimientos fluyeran por el borde.

Te espero en la linterna.
¿Alguna vez es tarde para encontrar un sueño? ¿Es posible reemplazar, ganar otro sueño?

¡Cómo terminó todo rápidamente!
No pude echarle un vistazo.