CONCURSO BOOKSTEEM-EL ENCUENTRO DE LA SABIDURÍA
Había una vez una joven, de ojos sinceros y mirada clara que caminaba sin rumbo por el transitado vivir. Era joven, pero despojada de su fuerza. Vivía sumida en la tristeza, casi desesperanzada.
¿Por qué a mí? se cuestionaba, ante su difícil situación que la vida le mostraba. Corría el tiempo, y poco a poco se sentía desmejorada. Tenía sueños, pero no la suficiente audacia para arrojarse y cambiar su desesperanza. ¿Cómo luchar con esa loza que su alma aplastaba?
Dicen que “al buen árbol se arrima, buena sombra le acobija” y en aquella joven resulto cierto, una de sus amigas, que había salidos de esas misma circunstancias le mostró el camino que le permitiría recobrar autoconfianza. Le mostró un bello libro con título atrayente “JUAN SALVADOR GAVIOTA” cada palabra que leía de aquel caudal de letras, poco a poco le insuflaba la energía necesaria, para concentrar su fuerzas.
Siguió leyendo hasta terminar la obra, y sintió tal como “el ave fénix”, retornaba de la sombra. Con fuerzas renovada salió de su entorno toxico. Busco nuevas fronteras y huyó LIBRE.
Aprendió que para temer energías positivas diariamente, hay que enriquecer el alma con palabras de sabiduría. “Un amigo verdadero ama en todo tiempo” reza el proverbio, cosa que es gran verdad. Porque la joven en la tristeza ya no vive ya. Sigue leyendo cada día, eso la llena de alegría.
Ha descubierto una fuente donde manan las fuerzas y las palabras. Una vez se topó con un relato que le dio la oportunidad de crecer, comprendió que “Amar es una decisión, no un sentimiento” aprendió que “somos dueños de nuestros actos”, que “no aceptamos malos regalos que otros nos traigan” así fue que aprendió “De la culpa es de la vaca”.
Cultivo “semillas de grandeza” “enriqueció su personalidad” “desarrolló una mente millonaria” sí, “Dejo de sobrevivir y comenzó a vivir”.
Ahora se le ve feliz e independiente, nada la somete. Descubrió que la vida se enriquece con palabras de sabiduría y reunirse con buena gente.
