A MIL LATIDOS POR SEGUNDO / by @Christopherb
Historia corta
Esas manoplas enormes del tamaño de mi cara, ¿cómo diablos se supone que voy a lastimarlo? Además del otro idiota que tiene el mismo semblante. Están ebrios, es la única ventaja (que puede igual ser una desventaja).
Tengo demasiada sed y el pecho me duele de tan fuerte que late mi corazón, abro la nevera y empiezo a beber de una botella energizante – ya es mi cuarta hoy -, abro la gaveta y saco dos cuchillos enormes, de esos que usa mamá para las carnes, y los agarro con fuerza. Aún a estas alturas mi mente hace pequeños vaciles y quedadas en blanco que me hacen dudar.
No dejaré que ese hombre nos siga destruyendo. Voy directo a las escaleras que está en frente de la sala, intentando evitar la mirada de mi madre, aunque es imposible. Voy rápido y agachado, sin ser muy sospechoso, con los cuchillos a mi lado izquierdo que da justo en frente de la pared por lo que mi madre no podrá verlos, o bueno, no debería.
Nunca he entendido como mi madre puede amar a alguien como él, y más encima preocuparse tanto por el... En ocasiones más que hasta en sus hijos. Pero está bien, ella cuida mucho a mis hermanos, cosa que justo ahora necesito, de esa manera puedo hacer todo más rápido arriba. Subo saltando los escalones sin pelarme ninguno hasta llegar a la dichosa habitación, desde afuera puedo oler la podredumbre de alcohol y cigarrillos, la música a todo volumen y risas que resuenan por toda la casa. Es como estar al frente de la última misión de “Batalla en el Castillo”, frente al hogar de esos ogros tiránicos que arrancan cabezas con los dientes. No puedo creer que aún aquí cuando voy a realizar la acción más despiadada que he hecho en mi vida, me encuentro haciendo chistes y referencias estúpidas.
Diablos, me duele demasiado el pecho, creo que tomarse 4 botellas de energizante en un solo día no es buena idea. Siento mi corazón latir por segundo, lo siento "A mil latidos por segundo", es horrible, pero... ¡Agh! ¡Basta de hablar estupideces, debes matarlo ya!
Abro la puerta de golpe. Los dos están viendo un partido mientras escuchan música, que asco. El me mira al instante, el ogro mayor, el violador, el abusador, mi Padre.
Yo solo me quedé callado.
¿Me invitó a sentarme con él? ¿A qué grado de alcohol habrá llegado?
No puedo arruinarlo, ¡no debo! Así que me levanto rápido y le clavo a Kevin en la cien el cuchillo.
¡Dios, no puedo creerlo! ¡Acabo de acuchillar a Kevin!
La sangre sale por montones y me quedo paralizado. El cuerpo de Kevin cae muerto en el suelo, manchando la alfombra y el sofá.
¡Se levantó, se levantó! Me agarra por el brazo y el otro cuchillo se cae, ¡demonios! ¿Ahora qué hago?
Aun cuando asesino a su mejor amigo sigue siendo el, ¿acaso le parece tan normal el que su compañero de borracheras esté sangrando en el piso justo ahora?
Me duele demasiado el pecho, no puedo respirar. Debo hacer algo, ¿pero qué diablos? Me está apretando demasiado el cuello, no sé qué hacer.
Esto está mal, pienso en mil cosas que puedo hacer pero ninguna resultaría, ¿qué hago…? ¡Un momento! ¡Tengo sus bolas en mis pies! Puedo patearlo... ¡Y lo hago! Pateo con fuerza su parte baja y de inmediato me suelta y empieza a chillar, me le escabullo como puedo por su costado e intento alcanzar el cuchillo pero el desgraciado me agarra por los pies. Le meto una patada en la cara y le lanzo una de las botellas vacías que rondaban en el suelo por toda la cara.
Realmente no sé qué diablos está diciendo, solo me preocupo por alcanzar el cuchillo para salir de esto.
Consigo agarrar fuerte el cuchillo con las manos y espero solo 2 segundos a que se me lance encima para entonces acuchillarle el estómago… ¡Y el animal lo hace! ¡Se me lanza encima y empieza a gritarme, entonces aprovecho para clavarle el cuchillo y que por fin cae rendido!
Está allí, tirado en el suelo, sangrando. Los dos lo están. Los dos ogros inmensos están muertos en el salón, sangrando como cataratas rojas. Estoy completamente desentendido del mundo. No sé qué diablos sucede a mí alrededor, lo único que escucho es la voz lejana de mi madre que intenta abrir la puerta a gritos, tras escuchar el alboroto.
Ya lo hice, lo asesiné. Mi misión está completa. Lo que sucederá después no me importa, sé que será mucho mejor que todo lo que ha sucedido antes. Eso me alivia, y me deja estar tranquilo.
A de ser porque estoy muy cansado, todo este alboroto me ha dejado exhausto. Tengo mucho sueño, y me cuesta un poco respirar… A lo mejor si descanso se me pasará y podré ayudar en lo que sea que me necesite mi madre más tarde. Mis ojos se cierran, que cómico, no aguanto el sueño. Ya me iré a dormir, dejaré que la oscuridad me guíe un rato.
Muchas gracias!!
Excelente!! Felicitaciones hijo!!
Muchas gracias má!