Sin duda estoy de acuerdo contigo. El vivir con un perro te cambia la vida. Son una fuente inagotable de enseñanza y bienestar. Haber compartido gran parte de mi vida con animales me ha hecho inmensamente feliz, pero además me ha aportado innumerables beneficios. Puedo decir con toda certeza que perros son mascotas increíbles; son animales muy fieles y leales que nos demuestran su amor en cada momento, son genuinos y no tienen problema alguno en mostrarse tal como son, ni en aceptarnos tal como somos. Cada día con ellos es una aventura y no hay un solo instante en el que estando con ellos podamos sentirnos solos.
Mis perritos en vida no solo eran mis amigos, mis compañeros y mis defensores. Yo era su vida, su todo. Eran uno más de mi familia, me demostraban su alegría y compartían mis tristezas, me dieron amor incondicional, eran fieles, leales, grandes compañeros, y siempre estaban ahí para mi.
Mucha gente que a los perros solo les falta hablar, yo creo que no, hablan con sus ojos, con sus movimientos, me asombran todos los días con su fidelidad, la lealtad e incondicionalidad.