La naturaleza está enfadada.

Que hermosa es la naturaleza, sus cambios bruscos y sus sorpresas, de ella vivimos y por ella morimos.

Últimamente las cosas no han salido muy bien con respecto al ambiente y la naturaleza, han habido terremotos, huracanes, tormentas, inundaciones. Personas han perdido sus hogares, sus familias, sus mascotas. Mi mas sentido pésame para todas esas personas que perdieron a alguien o algo importante para ellos en estas últimas semanas aterradoras.

Estamos en territorio ajeno, el mundo nunca fue de nosotros y nunca lo será. Valorar a la dueña del mundo y cuidarla, es lo menos que podemos hacer por ofrecernos este largo hospedaje. Tocamos lo que no debemos y ella lo reclama. Pero no sólo lo tocamos, lo quemamos, ensuciamos, rompemos, arrancamos... Y esperamos que todo siga como si nada.

Todos desearíamos que no fuera así, todos hemos insultado a la naturaleza aunque sea una vez por arrebatarnos algo, por arruinar nuestros planes o destruir, a todos nos gustaría que no fuera así, pero ¿Que hacemos para que sea diferencreemos

Nos creemos dueños del mundo, pero somos huéspedes temporales.