[THE DIARY GAME 3: 23-01-21] ¡A comer helado!

Querido diario, hoy me desperté como a las 9 de la mañana, estoy dormilona y también fue que anoche me acosté pasadas las 12, en realidad ya era hoy ; )

Tengo la dicha de que mi esposo prepara el desayuno y puedo dormir hasta que esté listo. Es maravilloso escucharlo decir: ya falta poco, vayan preparándose y entonces mi hijo y yo saltamos de la cama, nos alistamos y bajamos a la mesa. Agradecemos a Dios por nuestros alimentos y por cada bendición recibida, también por la paz mundial y la salud de todos. Agradecer atrae abundancia a nuestras vidas, abundancia de todo.

Después de esta importante comida, reposamos un rato en la cama, es tiempo de conversar de cualquier cosa. Luego yo estuve investigando acerca de los proyectos blockchain Polkadot y Kusama, que por lo que entiendo tienen mucho potencial, su propósito básicamente es interconectar las distintas redes blockchains. Me pareció bastante interesante y no podía parar de leer artículos y ver videos, hasta que mi esposo me llamó para almorzar un rico pescado frito.

_{Mi almuerzo: pescado frito, arroz y ensalada}

En la tarde teníamos la tarea pendiente de ir a buscar un helado que habíamos encargado ayer, con los 5 USD que mi hijo reunió por 5 de sus dientes, ya que el Ratón Pérez le trajo 1 USD por cada uno. Pensábamos ir caminando para hacer ejercicio, pero eran ya las cuatro de la tarde y mi esposo se sentía aún muy lleno del almuerzo y me dijo que prefería ir en carro, así que nos fuimos todos a buscarlo y pronto ya estábamos de regreso en casa. Este helado lo vende nuestra vecina de la casa que estamos remodelando y tiene variedad de sabores, cuando nos mudemos será mucha tentación. Es de un litro y trae cuatro barquillas de las que son crujientes y doradas.

_{Mi hijo feliz con su helado}

Inmediatamente lo serví y todos disfrutamos de esta rica merienda.

Para la cena preparé panquecas a petición de mi hijo, raramente a él no le gusta la arepa y no había tampoco plátano, ni suficiente harina de trigo para preparar pan, así que las panquecas eran la única opción. Está demás decir que me encanta hacer felices a mis amores en casa.

_{Mi hijo con su cena: panquecas con queso}

Y básicamente así transcurrió nuestro día, de charlas amenas, de compartir sueños, de investigar, estuve tan metida en la lectura, que cuando me iba a dormir tenia la cabeza súper cansada; la verdad es me acosté agotada, pero satisfecha y agradecida por este hermoso día. Sigo sintiendo que este año es excelente y nos permitirá crecer a pasos gigantescos. Imagino diciembre como un mes de celebración de éxitos. Amén.