174.2 Sentimientos agitados

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Traducción propia, principalmente de fuentes en inglés, pero comparando con la fuente en chino para mayor fidelidad.

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Cuando Shen Miao finalmente 'trepó' la última pared y entró en la residencia del Príncipe Rui, Cong Yang estaba tan cansado que no quería hablar.

Debido a que entraron desde el patio interior y no desde la entrada principal, no se vio un solo guardia en la gran residencia del Príncipe Rui. Cong Yang también tenía una expresión dudosa, ya que ahora esto no era tan descuidado en el pasado.

Shen Miao estaba mirando el diseño de la residencia del Príncipe Rui. Era tan lujoso y hermoso como en los rumores. Era solo un lugar temporal para quedarse, pero fue renovado tan bien. Uno realmente no sabía cuán extraordinario sería el Gran Palacio Imperial de Liang. Justo cuando estaba pensando en eso, un hombre de mediana edad vestido de negro apareció frente a ella.

"Tie Yi". Cong Yang gritó e inmediatamente preguntó: "¿Dónde están los demás?"

El guardia con el nombre de Tie Yi se sorprendió al ver a Shen Miao y le preguntó con las manos ahuecadas: "¿Hay algo urgente para que la señorita Shen venga personalmente?"

Shen Miao miró la apariencia del otro y él parecía conocerla. Al ver que Cong Yang lo saludó, supuso que él era la gente de Xie Jing Xing y dijo: "Estoy buscando al Príncipe Rui porque tengo algunas palabras que decir".

Tie Yi parecía saber que ella diría eso y asintió con la cabeza, “El Maestro está en el patio interior. Ven conmigo."

Cuando llega el invierno a Ming Qi, nadie estaba dispuesto a caminar afuera. Si fuera de noche, no habría una sola persona en las calles e incluso un nacimiento, un gato o un perro se quedarían en su cálido nido y no estarían dispuestos a moverse un poco.

El agua del estanque ya estaba congelada. La gruesa capa de hielo había cubierto completamente el paisaje, toda la escena veraniega de flores de loto y kois estaban nadando. Era como si no importara cuán buenos fueran los días, siempre pasaría. Al igual que las flores que florecen en primavera se marchitarían un día.

El joven vestido de púrpura dormía perezosamente sobre el árbol con ambas manos detrás de la cabeza y sin quitarse la máscara. Había una linterna colgando del árbol y bajo el débil halo de luz, su expresión parecía no ser de tristeza, pero no era felicidad y, en cambio, era algo solitario.

Era como el viento que atraviesa el árbol. Flotante ligero pero también frío y pesado. Tranquilo y silencioso.

El tigre blanco yacía debajo del árbol y de vez en cuando rascaba sus garras en el tronco y ocasionalmente mordía el hielo en el suelo. El aplastamiento de lo agradable era claramente audible por la noche.

Este paisaje fue lo que Shen Miao vio cuando entró. El joven y el tigre blanco dormían, pero le hizo pensar en su vida pasada, caminando en los Jardines Imperiales en medio de la noche, viendo los restos de la risa de Fu Xiu Yi y Mei Furen durante el día. Fue algo agonizante mientras caminaba sin ningún objetivo.

El tigre blanco repentinamente se dio cuenta de que alguien se acercaba e inmediatamente se levantó y la miró atentamente mientras gruñía de advertencia. Pero debido a que después de todo era demasiado pequeño, no había disuasión en su voz, por lo que era adorable.

"Jiao Jiao, shh". Xie Jing Xing dijo: "Cállate".

Shen Miao, "..."

Ella caminó hacia el árbol y miró a la persona que dormía en las ramas y dijo: "¿A quién llamas?"

Xie Jing Xing se movió y de repente miró hacia abajo. Cuando vio a Shen Miao, se sorprendió por un momento antes de preguntar: "¿Por qué estás aquí?"

"La conversación en la residencia Princess no había terminado, por lo tanto, uno vino a echar un vistazo".

Xie Jing Xing la miró pero no bajó del árbol y en cambio se rió entre dientes: "¿Viniste porque me preocupas por mí?"

"Lo que crees que es asunto tuyo", respondió Shen Miao.

"¿Podría ser que pensaste que estaría triste?" Xie Jing Xing parecía haber escuchado a un Joe y su expresión se interesó, "Realmente ingenuo".

"Es mejor si no hay problema ninguno". Shen Miao no prestó atención a su ridículo y dijo con calma.

Xie Jing Xing miró los cielos y agitó las manos perezosamente: “Regresa. Estoy bien."

Shen Miao no regresó.

El tigre blanco en el suelo parecía darse cuenta de que Shen Miao no tenía malicia y, además, su maestro no había mostrado ninguna hostilidad, por lo que gradualmente relajó su vigilancia antes de abrazarse a los pies de Shen Miao y gritar.

Shen Miao miró rápidamente al joven en el árbol.

Después de un largo rato, ella preguntó: "Xie Jing Xing, ¿quieres eliminar a Ming Qi?"

El aire quedó en silencio en un instante y parecía que había pequeñas chispas persistentes que salían de una de las linternas colgantes.

En la tenue luz, las ramas ocultaban la expresión del joven de que incluso si uno podía verlo, uno no podía ver su expresión debido a la máscara. Uno solo podía ver la esquina de la hermosa túnica púrpura que colgaba con los hilos dorados que brillaban bajo la luz. Esas líneas se entrelazaron y agitaron, pero parecían esbozar vagamente la imagen de una bestia.

Aparentemente un dragón.

El silencio lo hizo sentir aprensivo y no respondió.

La espalda de Shen Miao estaba apoyada contra un árbol cuando dijo débilmente: “Si al final quieres limpiar a Ming Qi, entonces todos los que encuentres pueden ser adoptados o descartados. Hay poco terreno común para el entendimiento entre personas de principios diferentes. Algunas personas son buenas pero están destinadas a no estar en la misma ruta. Como hay diferentes rutas, ¿por qué preocuparse por ellas?"

Xie Jing Xing se rió y su voz se escuchó en la parte superior, "¿Me estás consolando?"

"No. Me estoy consolando a mí mismo ”. Shen Miao respondió.

Ella podía entender a Xie Jing Xing, pero era algo diferente de Xie Jing Xing. Xie Jing Xing era un hombre y tenía que ser aún más decisivo, por lo tanto, uno creía que después de esta noche, él seguiría siendo el príncipe confiado Rui y nada era difícil para él y no había nada que pudiera detenerlo. Era como un león que tenía una existencia poderosa, pero es solo que cuando estaba lamiendo sus propias heridas solo, ella se encontró con él.

"¿También tienes asuntos que llorar?" Xie Jing Xing se burló, todavía usando el tono frívolo como antes. Sin embargo, Shen Miao sabía que en sus ojos no había sonrisa en este momento.

Esto se debió a que había algunas emociones que incluso él no pudo ocultar, por lo que subió al árbol donde nadie podía ver e incluso no estaba dispuesto a quitarse la máscara y sentarse allí en silencio.

“Mis asuntos de duelo no son menos que tú”. Shen Miao sonrió suavemente, “Al menos la princesa Rong Xin está viva. ¿No debería ser lo más doloroso del mundo que la persona que te había malinterpretado y culpado se haya ido? Algunos errores pueden ser compensados, pero algunos errores no pueden corregirse".

Como ella, Wan Yu y Fu Ming. Ella podía salvar a muchas personas, pero solo estas dos no podían salvarse. Incluso si la vida entera estuviera agotada, uno no podría salvarlos en absoluto. No importa si podría tomar su mayor venganza en el futuro, o incluso si toda la familia Shen pudiera vivir espléndidamente, no habría ninguna oportunidad para compensar este arrepentimiento y solo se podría pensar en eso por la noche.

Incluso soñar con eso era un lujo.

“También sabías que habría un día así tarde o temprano, así que ¿por qué preocuparte? Todo está destinado y las cosas que se hicieron con meticulosa virtud y atención al deber. Todo lo demás sería demasiado y esto es solo que el destino ha llegado a su fin". Shen Miao dijo: "Nadie caminaría con nadie en el mismo camino durante toda una vida. Al igual que mi matrimonio. Fu Xiu Yi no está en el mismo camino que yo, el Príncipe Heredero no está en la misma ruta que yo. Huang Fu Hao no lo es, Feng Zi Xian no lo es, Luo Ling no lo es y Pei Lang tampoco lo es".

Fu Xiu Yi y el Príncipe Heredero eran personas de la familia Fu y, naturalmente, eran sus enemigos, era imposible estar en la misma ruta que Shen Miao. Huang Fu Hao trabaja por motivos siniestros. Feng Zi Xian creció sin problemas y sin golpes en la vida como una flor en un invernadero y era diferente a ella. La personalidad de Luo Ling era sencilla, entonces, ¿cómo entendería los esquemas y los cálculos malvados? En cuanto a Pei Lang, fue un enredo complicado ya que en la vida pasada había estado involucrado en la destrucción de la vida de Shen Miao. Esto siempre la separaría de él, tanto que nunca podría tratarlo honestamente.

"Si lo dices así, no hay nadie debajo de los cielos que esté en el camino contigo". Xie Jing Xing le recordó.

"La verdad es así".

Shen Miao suspiró en su corazón. Para una persona que se arrastró fuera de la tumba y vivió la segunda vuelta, había algunas partes, de alguna manera, que eran casi como un fantasma. Ella había estado viajando sola en el camino de la venganza y siempre había sido así.

"Entonces, consolándome así, me haría tener la ilusión". Xie Jing Xing sonrió suavemente, "Que tú y yo estamos en el mismo camino".

El viento recogió las hojas en el suelo y lo lanzó al estanque. La superficie del estanque estaba congelada hasta que era tan dura como una roca e inquebrantable.

Parecía que se podía ver a través de la superficie del estanque como se podía ver la brisa que soplaba en la primavera y el florecimiento de las flores del agua. El hielo en el estanque brillaba ligeramente y la escena de flores rojas y sauces verdes era de hecho un gran paisaje para mirar.

Los días de invierno siempre pasarían y la primavera siempre llegaría.

La voz de Shen Miao era ligera, incluso más ligera que el viento de la noche mientras llenaba el aire.

Ella dijo: "¿Quién dice que no lo es?"

Luego, consolándome así, me haría tener la ilusión de que usted y yo estamos en el mismo camino.

¿Quién dice que no lo es?

La sombra del árbol brilló y alguien bajó de él. La espalda del joven era alta y hermosa, y cuando el tigre blanco vio que su dueño había bajado, inmediatamente corrió de alegría e incluso lamió la esquina de la túnica de la otra parte.

"¿Crees que soy el Príncipe Rui de Gran Liang o el Pequeño Marqués de la residencia del Marqués de Lin An?", Preguntó.

Shen Miao se apoyó contra el árbol y colocó ambas manos detrás mientras miraba su vista trasera, "¿Es esto importante?"

"Yo también pensé que no era importante". Xie Jing Xing estaba de pie junto al estanque. Su voz era tranquila, como si no hubiera olas en absoluto cuando dijo: "Desde el momento en que supe de mi identidad, habría personas que me recordarían constantemente que es importante".

“El marqués de Lin An es débil, incompetente, indeciso y no es digno de ser padre. Incluso si el verdadero Little Xie Marquis no muriera al principio, aún moriría en las manos de Madame Fang... Rong Yi me trataba bien. Pensé que era importante para los demás, pero para ella, mi identidad no sería importante. Pero ahora parecía que había cometido un gran error".

Él dijo con dulzura: “Para las personas bajo los cielos, este tema había sido importante desde el principio hasta el final. No hay cambios".

Creer que todos los sentimientos serían capaces de romper los grilletes de la identidad y los sentimientos familiares serían sobre todo, pero al final fue una bofetada. Lo más importante fue ese sentimiento de profunda decepción.

Shen Miao miró a su espalda y solo habló después de mucho tiempo: "Para mí, no importa".

Xie Jing Xing se rió ligeramente.

Se dio la vuelta y caminó hacia Shen Miao antes de detenerse frente a ella. Miró a Shen Miao y preguntó: "¿Sabes quién soy?"

"Solo eres Xie Jing Xing". Ella se negó a admitir la derrota y parecía estar presionando el impulso de la otra parte.

"¿Solo?" Estaba un poco insatisfecho.

“Puedes engañar a otros pero no puedes engañarme a mí”. SHen Miao miró su máscara, “Desde el principio sé qué tipo de persona eres. Desde que te conozco hasta que concluyó la alianza, eres solo Xie Jing Xing, nada más.

Xie Jing Xing emitió un sonido largo y significativo de "oh".

Dio otro paso adelante y Shen Miao se retiró inconscientemente. Estaba apoyada contra el árbol y esta vez su espalda estaba apoyada contra el árbol y no había forma de retirarse y Xie Jing Xing levantó la barbilla.

Xie Jing Xing dijo: "¿Encuentras que soy cruel?"

"Uno no piensa así, ya que yo también soy igual", respondió Shen Miao.

"Entonces, ¿sabes que no soy una buena persona?" Su voz era muy profunda y agradable de escuchar, y con el viento frío que soplaba en el oído, hacía que todo el cuerpo se sintiera caliente.

Shen Miao retrocedió pero no estaba dispuesto a ser menospreciado y dijo: "Lo sé, yo tampoco lo soy".

Xie Jing Xing se aferró a su cintura y atrajo a Shen Miao hacia él. La máscara estaba bloqueando su rostro, haciendo que su hermosa apariencia fuera un poco misteriosa. Él dijo: "Entonces ahora puedo responder a tu pregunta".

"¿Qué pregunta?" Shen Miao no entendió.

"Me preguntaste si quiero eliminar a Ming Qi".

Shen Miao lo miró y en ese hermoso par de ojos, solo se llenaron de brillantes gemas brillantes como si uno pudiera ser absorbido.

"Entonces, ¿cuál es tu respuesta?", Preguntó.

"Si digo que sí, ¿me reportarás?" Xie Jing Xing sonrió diabólicamente.

Shen Miao dijo lentamente: "No."

"Porque yo también soy igual".

Fue como si de repente aparecieran chispas en la capa de hielo. Uno no podía ver si estaba feliz o enojado cuando preguntó: "¿Sabes lo que estás diciendo?"

Shen Miao estaba en silencio.

Apretó los dientes como si quisiera tragarse a Shen Miao por completo. "Shen Miao, es mejor que no te arrepientas. Una vez a bordo de mi barco, no se puede bajar de él en esta vida ".

De repente se inclinó y besó a Shen Miao.

Shen Miao, inconscientemente, quería evitarlo, pero Xie Jing Xing lo sujetó por la cintura. Su máscara fría tocó la cara de Shen Miao mientras sostenía las manos de Shen Miao y besaba sus labios con rudeza.

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