Le habían asignado un nuevo cargo en una sucursal de la empresa, en otra ciudad, en otro país. Nadie lo conocía, no había foto de él, en ninguna pared.
El gerente le encantaba sorprender a sus nuevos empleados. Evaluaba las fallas, los pro y los contra, llegando por sorpresa o haciéndose pasar por un simple empleado. Así podía observar a los que lo hacían mal. En su cargo de infiltrado escucho las barbaridades e inventos que le atribuían al nuevo jefe, su persona.

Era un ogro que se comía a la gente, dijeron unos. No vale, es alguien que asusta a morir. En esa semana de observación lo encontraron husmeando en el depósito y lo atraparon hasta llevarlo al gerente de la tienda encargado.

Costo unos pocos minutos aclarar la situación, pero algunos salieron como corcho de limonada, despedidos hasta siempre por el infiltrado. Más que todo aquellos que se aprovechaban de objetos ajenos.

Gracias a @latino.romano por traernos estas sencilla dinámica, si te gusta escribir esta es muy sencilla y hasta divertida.

Es muy fácil, coloca tu reloj sobre la mesa y realiza esta actividad. Cinco minutos es un ejercicio de escritura rápida, que nos mantiene activos y tecleando en el computador.

Para participar en el reto te comparto el enlace aquí

Invito a mis amigos a realizar este estupendo post en forma creativa: @lisfabian, @purrix, @issymarie.