Reseña de "La Verdad Sospechosa" de Juan Ruiz de Alarcón

vickaboleyn (65)in #spanish • 6 years ago (edited)

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¿Alguna vez se han preguntado qué haría un mitómano por el amor de una mujer? Juan Ruiz de Alarcón se lo ha preguntado, y hasta se lo habrá imaginado innumerables veces. Como era natural en alguien de su formación, y como era natural en la época en la que vivió, se enfocó en trasladar sus ideas al papel. Dos años después, salió la que sería su principal stand-up grupal, perdón, su obra teatral.

Una de las máximas representantes literarias del Siglo de Oro novohispano, La Verdad Sospecha es la historia de un tal García, joven proveniente de una influyente familia madrileña con una mitomanía literalmente nivel Dios, misma de la cual el tipo es tan (in)consciente que no le importó mucho (al menos en lo que a él le conviene) arruinar amistades, causar malos entendidos entre novios y otras tantas cosas que se pueden apreciar a lo largo de la lectura. Todo eso con tal de ganarse el favor y el afecto de Jacinta, mujer de su misma clase social... Y a quien confunde con Lucrecia, la amiga de la primera y a quien el buen García menosprecia.

Ahora bien, confieso que, antes de leer esta obra teatral, no sabía absolutamente nada de Juan Ruiz de Alarcón, y eso que muy vagamente me lo mencionaron solo una vez en la preparatoria hace unos 12, 13 años. Empecé a conocer más de él a raíz de mi labor como maestra titular de preparatoria, cuya materia se llama (léase con ironía) Literatura III.

Y créanme que si por algo esa materia se está convirtiendo en mi favorita, es justamente porque termino conociendo autores nuevos, o gente muy conocida en mi país, como es el caso de Ruiz de Alarcón. Por lo tanto, leerme esta obra capital de Ruiz de Alarcón equivalió a risas, a preguntarse y a maravillarse como alguien con una muy insana propensión a decir mentiras, por no decir un mitómano, es capaz de llevar su “mala arte” a puntos insospechados.

Ahora bien, lo que más me ha gustado de la obra en sí es la definición de los personajes; Ruiz de Alarcón dota a cada uno de cierto ingenio y personalidad. Una lectura relajante y en cierto modo divertida, escrita a la vieja usanza de la Madre España y que te hace pensar por un momento que si Ruiz de Alarcón hubiese nacido en el México contemporáneo, o habría sido un comediante tipo stand-up o habría sido un escritor consagrado.

¿Lo recomendaría? SÍ, especialmente para leerse en una clase de literatura.