¿Me quieres o me odias?

vezo (58)in #spanish • 5 years ago (edited)

Ella es pura poesía, la lírica más sensible y acogedora. Los versos que nunca escucharás de un ser humano común, ella te los recitará cerca de tu oído con una suave voz de miel.

Ella es única: nada existe en este mundo que se le parezca. Es embriagadora: una vez que llega a ti jamás te abandona, se queda a tu lado, al acecho, vigilante y alerta.

Sigue cada uno de tus pasos, no da tregua alguna, ella debe y necesita depositarse en ti para sembrar la semilla de su espíritu. Un ente que irá creciendo lentamente a través de tu propia alma para volverse uno solo contigo.

Porque ella respirará de aquí en adelante cada vez que tú lo hagas. Porque ahora se entremezclan y comparten el mismo hogar. Porque ella sin ti no es nada. Porque tú eres su única fuente de vida.

¿Comienzas a sentirte asfixiado o todavía no?

Su objetivo es no dejarte ir nunca, ha llegado a ti sin que tú mismo te des cuenta. Ha construido su propio mundo en el tuyo sin tu consentimiento, dulcemente y al amparo de tus emociones.

Ella es letal y ahora comienzas a sentirlo. Su canturreo diario ya no parece tan mágico como al principio. Su prosa melodiosa ahora solo te empalaga. Su abrazo ya no te consuela como antes, solo te pesa y te incomoda.

Se ha convertido en un parásito que solo succiona cada día una parte vital de ti. Es, literalmente, la sombra que te acompaña a todas partes. Solo existe el alivio al anochecer, los días son de ella y por ella.

Porque tus emociones, pensamientos, sentimientos y miedos más profundos ya no te pertenecen, ahora son de su propiedad. No tienes idea de quién eres, solo la reconoces a ella, observas a través de sus ojos, no de los tuyos.

Ahora eres tú quien apenas sobrevive.

Te encuentras tan hipnotizado que tu cuerpo también empieza a sufrir el peso de otro ser que está de más. Te sientes débil, inapetente, somnoliento y falto de vitalidad.

Te sientes tan eclipsado. No logras comprender en qué momento apareció este visitante no deseado. Es aquí cuando las ideas de angustia y culpa aparecen, alimentándola más.

Percibes a diario sus manos frías acariciando tu espalda, recordándote que está disponible en cualquier momento para ti, porque ella es la única que siempre estará a tu lado.

Entonces le crees, te sientes tan miserable y solo que la dejas entrar cada vez más. Porque al final de todos tus días, nadie te entiende ni está contigo como ella. Porque ella sabe cómo apoyarte y arrullarte en sus brazos.

¿Todavía respiras?

Es aquí cuando ella decide presentarte su hogar, entonces te arrastra por un camino lleno de espinas hacia un agujero estrecho en el que te deposita.

Estás allí, solo, a expensas de ese ser oscuro. Ahora deseas escapar, pero no encuentras la salida. No logras ver absolutamente nada.

Ella solo reaparece para alimentarte de emociones negativas, ansiedad, desesperanza, soledad, insomnio y pensamientos destructivos.

Luego vuelve a desaparecer, cerrando la tapa del agujero en el que estás para que no puedas salir. Ella ha tomado tu mundo y ahora lo vive por ti.

Este relato que acaban de leer se lo dediqué en su momento a una situación que me afectó bastante. Literalmente, era como estar en un agujero negro, atrapada y entre sombras. La depresión se encarga de hacerte creer que no tienes a nadie y que ella es tu única compañera. Hasta cierto punto se torna adictiva porque sientes que sin ella estarías más sola. Ahora, estas palabras se las dedico otra vez, pero desde afuera. A veces la observo intentando entrar de nuevo, calculando la manera de manipularme. Luego la veo irse, frustrada porque ya no puede alimentarse de mí.

Hablar de esto en pasado me parece tan increíble... en su momento llegué a pensar que me deprimiría por siempre, pero aprendí de esta experiencia que sí existe una salida, solo hay que saber pedir ayuda. A veces necesitamos que nos den un empujón para salir a la superficie.