Una historia sin Nombre. -Relato corto 3-

Continuación, y final de los tres grandes mini relatos. Pueden leer el primer relato y el segundo acá mismo.

Primer diario, del Primer aliento, del primer segundo.
Ensayo, error.
Ensayo, error.
Ensayo, error.




Tenia mi primer ojo cuando comencé a ordenar de forma sistemática todos los eventos. En seres como yo, cada ojo es una invaluable herramienta de aprendizaje respecto a los eventos que siguen suscitándose sin descanso. Debido a mi condición de extensión misma, lo mas prudente siempre fue mantener mi propia existencia al margen, limitándome al rol sencillo de observador, por lo que almacenar todos estos recuerdos resulto una tarea relativamente sencilla. Esta capacidad creo mi primera deuda con el, sumado a algún otro capricho mínimo que aun disfruto.


Aun hay procesos por entender con respecto al segundo. Las intenciones del primero siempre fueron caprichosas, pero la sumisión del segundo ha sido repentinamente interrumpida por un ideal abstracto. El orden que estos dos mantenían ha sido violado por un bien mayor, que no arropa a ninguno de estos sino a seres mas frágiles.


El eco del silencio en el vació se ha visto ahogado por la adoración de entes benevolentes imaginarios: Las mascaras del creador, provistas por sus propias criaturas. Adornos a la existencia primal, decorados con grandezas. Reflejos de su naturaleza sexuada.


El silencio contra el ruido, en una eterna batalla que aun quienes miran a los cielos nunca serán capaces de comprender a plenitud. Choque de tonalidades opacas y eternas. Refreno del primer pacto, y un deseo que se niega a morir.


Estas criaturas nunca fueron capaces de observarlo en su faceta real...






...hasta ahora.



( Ref.1 / Ref.2)