Concurso Cervantes: 3ª Entrega

Una interpretación inmediata y personal 

Debo confesar que no conocía a  Ricardo Cinalli,   ni mucho menos la obra  Ready-made boy  que me dispongo a comentar. Por este motivo no voy a utilizar criterios que pretendan tener el más mínimo sabor académico. Creo que las interpretaciones sobre el arte sumergen al espectador en su propio ecosistema de ideas y en esto mismo ya hay un importante valor.

La imagen del cuerpo humano tiene en el arte figurativo una singular fuerza expresiva. Los estudios anatómicos fueron tema de intenso estudio por los grandes maestros de la pintura.  Leonardo da Vinci  o Miguel Angel formaron las bases de su genial obra con un interés casi obsesivo por el cuerpo humano y sus proporciones.

Vida, cuerpo y conciencia de ser

En Ready-made boy se representan las ideas esenciales que debemos formamos al reflexionar sobre la realidad. La compleja trabazón de elementos que componen la vida aparecen en el esbozado estudio anatómico. En él concurren mezcladas formas de insectos que sugieren la idea de la unidad que hay entre todos los seres vivos. Ricardo Cinalli subraya así con medios artísticos la masa común que existe entre las estructuras biológicas superiores con aquellas otras más alejadas de su escala evolutiva.  

De la arquitectura de la vida pasamos a la idea de cuerpo. El cuerpo es la realidad que hay detrás del concepto de individuo, sea del género humano o cualquier otro ser vivo. Expresa los límites y las posibilidades de la inserción de la vida en la tierra. Da igual que sean vistos desde individuos, especies, géneros, sociedades o grupos.

El último nivel es la conciencia de ser. La división que se establece entre sujeto y objeto está simbolizada por el ojo que ocupa una parte casi central en la pintura. Es el foco irradiador en el que el espectador debe caer para sentir y aproximarse a la realidad con una nuevas ideas. Las que, sobre ella,  la obra es capaz de transmitir al público que la interpreta.

Hay un inicio de mirada que se remarca con el color y la tonalidad. Contrasta mucho con los otros más oscuros vistos en el resto de la obra. Destaco en ella a la conciencia camuflada entre materia y formas pero sin poder desprenderse de su tarea esencial de dar sentido a lo que existe.

Conclusión

La obra nos interpela, parece querer decirnos individualmente: despierte, lo que usted ve le representa y lo que usted ve le está mirando. La tensión entre sujeto que observa y el objeto de la observación establece un diálogo creado por el talento del artista. Se abre en esta obra una reflexión profunda sobre la conciencia de lo que somos y nuestro lugar en el mundo.

Espero que les gusté.

Imagen compuesta por el autor del post desde imágenes tomadas de fuente y pixabay

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