Concurso de Nano Narrativa (Semana 12) -- Alma (microrrelato)

Cerró suavemente los ojos ¡Era tan feliz! Notaba la brisa cosquillear su nuca a través de su pelo largo y liso. Unos impulsos se apoderaban de ella. Eran como pulsaciones provenientes del propio alma de la tierra, del planeta. Extendió sus brazos en una ondulación rítmica que acompañaba a esas pulsaciones. Como si hubieran formado parte de ella desde siempre. De su propio ser. De su propia alma...

Sentía que podía volar, que su vuelo era como una caricia nacida del amor más profundo. Sus pies se levantaban de un suelo que era ahora de colores muy vivos, acompasados y entrelazados con su propia energía. Una sonrisa. El tiempo se había parado y ella podría estar ahí siempre. Así siempre. 

Una cometa que pasaba también volando junto a su sonrisa. La risa de unos niños que corrían y jugaban ajenos a todo. Ese olor a tierra húmeda que tanto le gustaba. Comenzó a saltar, estaba descalza. Como cuando era una niña pequeña de apenas siete años y corría, también descalza, por los sembrados del abuelo después de las primeras lluvias primaverales. Las esferas de un malabarista danzando sin descanso. Haces de luz atravesando su pecho cargado de vida. Un acorde más... y otro. Y otro impulso... y otra sonrisa.

Abriendo lentamente sus ojos con tanta pausa como cabía en ese tiempo eterno. Unas lágrimas sinceras y muy pequeñitas se deslizaron por su temblorosa mejilla y cayeron a la tierra. Que las recogió para siempre en el ciclo natural. Su alma brillaba ahora como nunca. Y era feliz, había encontrado su lugar con el mundo.

Con este microrrelato participo en el concurso de "nanonarrativa" de @acropolis. Cada semana nos proponen un interesante ejercicio literario donde debemos escribir una historia corta a partir de alguna premisa previa. Anímate a participar, encuentra aquí las bases.