El Palacio Real y Fortaleza de su Majestad, comúnmente llamada la Torre de Londres, es un recinto histórico emplazado en Tower Hill, en el distrito de Tower Hamlets.

Fundado en 1066 durante la ocupación normanda, el castillo ha tenido diversos usos hasta la fecha, éste ha fungido como fortín, mazmorra, tesorería, casa de la moneda, hogar de fieras salvajes, sitio de resguardo de las de las preciadas joyas Corona, entre otros.

Anteriormente, cada vez que se coronaba de un nuevo monarca solía realizarse una marcha desde la torre hasta la abadía de Westminster. Como dato peculiar, el guardia de la torre es el encargado de la misma en ausencia del monarca.

En las inmediaciones podemos observar el custodio de la torre, el imponente Tower Bridge. Esta hermosa y llamativa estructura oscilante construida en 1894, es sin lugar a dudas uno de los símbolos más notorios de la ciudad. No debemos confundir el Puente de la Torre con el Puente de Londres, ubicado casi un kilómetro río arriba.

El puente consiste de dos torres gemelas acopladas entre sí por dos pasarelas horizontales, y es transitable tanto para vehículos como para transeúntes. Cabe destacar que las salas de máquinas datan de la época victoriana.