A bailar Merengue raspa canillas… – Historias de Hospital
Soy el Superman del jardinero…
Recuerdo que fue hace mucho tiempo quizás hace unos 6 años, cuando yo apenas era residente de traumatología en un hospital muy pequeño de mi ciudad pero que sin duda alguna llegaban muchos accidentes, no tenia ni 5 minutos que acababa de recibir la guardia cuando de pronto tocan la puerta de la emergencia y traen a un sujeto cargado y lo tiran en una de las camillas.
Yo rápidamente me acerqué a verlo, podía notar que pie derecho tenía una herida en los dos primero dedos del pie prácticamente estaban casi amputados, y de pronto suelto la frase mágica “amigo como le sucedió esto a usted”.
Bueno doctor resulta que yo soy un jardinero porque me gusta estar en los jardines (mi cara fue de un ¡Ah OK!).
En esto yo me encontraba muy animado y quise ir a cortar la grama con una podadora nueva, al agarrar esa bicha podía sentir la potencia, los caballos de fuerza, simplemente tenia un sonido impactante y muy agradable al oído.
Cuando de pronto paso lo que nunca me imaginé, llego mi compañero y prendió la radio a todo volumen y en eso estaba sonando un merengue dominicano de esos que te ponen a mover las canillas.
Simplemente no lo dude y empecé a bailar como si fuese Travolta en fiebre de sábado por la noche, pero al ritmo de merengue, en eso sin querer doy una media vuelta soltando la podadora, la bicha se vino de retroceso y paso justo por mi pie derecho, fue tan rápido que no sentí nada.
Al verme mi pie así, caí desmayado y solo recuerdo cuando me traían en una pick up la cual tenía los parlantes a todo volumen, pero con techno merengue y bueno doctor aquí estoy.
Yo realmente estaba era mas emocionado por la historia que me estaba contando que casi se me olvida que tenia una herida en su pie, aparte de que me estaba matando el hambre, entonces lo primero que hice fue realizarle una buena cura ya que tenia restos de grama y tierra en la herida, mientras le hacia la cura cabe destacar de que se desmayo unas 3 veces jejeje, y no era por dolor porque tenía anestesia.
Al finalizar lo leve hasta la sala de Rayos X, donde al realizar dichas radiografías pude notar rápidamente que tenia uno de los dedos fracturados, lo cual eran malas noticias para él.
En eso le tuve que decir lo que estaba pasando, y él con una gran sonrisa dice: “me van a colocar un yeso”, lamentablemente tuve que decirle que no, había que llevarlo a quirófano para operarlo, pero lo grave del asunto no era eso, sino que no podía ser llevado a quirófano ya que el quirófano se encontraba contaminado.
Por lo que tuve que ser muy osado y arriesgarme a realizar el procedimiento abajo en sala de Trauma-Shock , yo le explique lo que sucedía y él no entendió mucho y sin embargo acepto, entonces aquí es donde me pongo la capa de superhéroe jejeje, decido colocar mucha anestesia local, y lave con abundante solución NaCl al 0.9%,, al explorar pude notar que la fractura era abierta ya que se veía hasta el hueso y también que tenía un tendón flexor totalmente roto, en vista de que no estaba en quirófano y no tenía los utensilios adecuados tuve que improvisar, me sentía como en la guerra.
Tuve que estabilizar la fractura con una aguja gruesa de una inyectadora, se puede leer muy fácil, pero atravesar el hueso y evitar que no se doble la aguja es muy difícil.
Tuve que realizar la reparación del tendón sin tener una buena luz ni tampoco mis lentes con lupa, y a pesar de eso lo hice muy bien.
Para finalizar tuve que realizar una buena rafia de la herida.
También coloque una inmovilización que diera protección al gran trabajo realizado.
Finalmente volví a realizar otra RX para ver si había colocado la aguja bien, y creo que mejor sería un abuso jejeje.
Como ya es normal en mí, tome algunas fotografías con el teléfono celular que tenia en ese momento y se las mostré a mi paciente para que viera el “Antes y Después”, él al ver las imagines se emociono tanto que me dio un fuerte abrazo, gritando “Doctor usted es un héroe, gracias muchas gracias”, yo simplemente le dije tranquilo amigo que yo hice lo mejor que pudo ya que es mi trabajo ahora vamos a ver como evoluciona.
Un mes después, el paciente se encontraba nuevamente en mi consultorio, pero estaba vez venia a retirarse los puntos y la aguja, cuando le retiro ambas cosas se desmayó, el al despertar se puso una media luego su zapato y empezó a bailar, diciendo que no le dolía y que ahora si iba a hacer todo lo que tenía en mente.
Un análisis muy sabio…
Muchas veces en la medicina 1+1 no es 2, y debemos salirnos un poco del protocolo para poder ayudar a nuestros pacientes, en esta oportunidad siento que fui muy osado, pero no había de otra manera para salvarle los dedos a ese personaje bailador de merengue jejeje.
La vida todos los días nos pone retos y pruebas que debemos superar, la cuestión es que nosotros sepamos encontrar la estrategia perfecta para superarlas, quizás estas experiencia que yo les publico acerca de mis paciente puedan hacer notar lo difícil y encantador que es a la vez ser médico, les deseo que tengan mucho ánimo en este día así como yo @romulexx lo tengo desde que me levante jejeje.
Todas las fotografías y el relato es contenido original perteneciente a: @romulexx y fueron capturadas por la cámara de un teléfono celular marca Samsung Galaxy SIII
Jajajaj excelente anecdota
Si de verdad que si @frankjavier nada mejor que hacer lo que a uno le gusta
Cosas que pasan en la emergencia jajajaja. Bueno tu post.
Te invito a leer mi blog :)
@ynescarola me alegra que te haya gustado, claro que si en lo que tenga tiempo lo reviso, Saludos!
Interesante anécdota y muy buen post.
Por cierto le recordaste que no vuelva a bailar cerca de podadoras?
@alejandrasq si por supuesto Jejejeje