Una noche distinta.

Siempre tuve la curiosidad de acudir a ese local tan nombrado. Y la noche de ese viernes me decidí a asistir, para distraer la mente. Toque el timbre y miran por una ventanilla muy pequeña, y en segundos las puertas se abren. Al pasar mis tacones hacían ruido en ese piso de madera. Me quedo observando y todo se encontraba en luz tenue. Todo estaba decorado como un cabaret a la antigua, llamó mi atención una pantalla gigante donde todos observaban embelesidamente pornografía, y pensé es que nunca la han visto. Me acerque hasta la barra y un chico se me acerca y me pregunta:

Me siento en la barra y el chico desaparece, pido un vino, al tomarme el primer sorbo comienzo a observar, como una mujer le hacia sexo oral a un hombre, mientras tenia a uno que la penetraba simultáneamente. Ver eso me hizo estremecer y termine de tomar la copa de vino. Me acerque hacia la pista de baile y me senté en unos de los sillones, el juego de luces y la música era agradable.

Veo que una mujer me mira a distancia, sonríe y me saluda levantando su copa, y yo le devuelvo el saludo y la sonrisa. Se levanta y se acerca con sus tacones negros y su mini vestido negro, sus piernas llamaban mucho la atención, me toma de la mano y me dice:

Me dio temor, pero termine aceptando, las miradas estaban centradas en nosotras dos, y en un abrir y cerrar de ojos sentía sus labios en mi cuello, y me susurra:

Asentí y con su mano me guío hasta el sillón, comenzó a tocar mi cuerpo, lo besaba lo acariciaba, sus manos eran suaves, delicadas, me incitaba a seguir el juego, con sus dedos acaricia mi sexo por encima de mi panty, y susurra:

Abre su cartera y saca un juguete, me lo muestra, me lo pasa por mis labios para que lo chupe, luego de hacerlo ella lo chupa y lo pasa por mis senos, y mis pezones se endurecen.
Me penetra con su juguete, las miradas, el efecto de vino, sus movimientos hábiles y rápidos, hicieron que me corriera rápidamente, ella se agacha y saborea mi sexo chupándolo por completo, mientras yo cerraba mis ojos sintiendo los espasmos de mi orgasmo y su lengua saboreándome hasta saciarse. Ella se levanta, me besa en la boca. Guarda su juguete en su bolso, mientras yo me arreglaba mi vestido.