Una copia barata de “Mad Max” llamada Venezuela

 Creo que muchos de nosotros hemos visto la famosa película “Mad Max” ganadora de la mayor cantidad de premios en diversas categorías de los Premios Oscar del año 2016, esta remasterización de un antiguo clásico del cine sorprendió a propios y extraños con su adaptación a la película original lo que la llevo a ganar la mayor cantidad de estatuillas en la edición de hace casi dos años. Un desierto en un mundo post apocalíptico donde habitan creaturas deformadas por la contaminación y destrucción a la cual los mismos humanos han conducido al planeta Tierra, unos pocos humanos tratados como esclavos con pésimas condiciones de vida en un escenario donde el poder esta ligado al liquido vital que representa el agua y al famoso petróleo que en este contexto se hace aun mas merecedor de su famoso apodo “El oro negro”. 

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     No pretendo hacer un extenso análisis de la película pues ese no es el punto principal de este post solo quiero dejar algunos puntos claros para aquellos que no estén familiarizados con la película pues son esto puntos en los cuales voy a basarme para establecer la comparación a la cual hago referencia en el título. Para nadie es un secreto la crisis actual que atraviesa mi país Venezuela, donde un gobierno que en realidad es una dictadura disfrazada con un disfraz al cual cada segundo que pasa se le notan más las costuras, al punto que solamente aquellos que se encuentran totalmente segados por un “ideal político” son incapaces de ver todo el daño y destrucción que este ha traído consigo. Un gobierno basado en el populismo, el cual maravilló a un elevado porcentaje de la población con facilidades y falsas ideas de igualdad de condiciones para todos, al punto que convirtieron a este porcentaje de la población en individuos dependientes de un líder, alguien que les diera todas las comodidades y los “ayudara” a ser mejores mientras ellos no requerían trabajar para ello.  

   Nunca se había visto en la historia venezolana una situación tan crítica en todos los aspectos como lo es la actual, al punto que para conseguir alimentos, los venezolanos solo poseen dos opciones, comprar los mimos a elevados precios que sobrepasan el salario de la gran mayoría de los trabajadores o esperar por horas en filas kilométricas para poder comprar alimentos a precios asequibles, muy alejado de los ya lejanos tiempos en los cuales el trabajador promedio podía ir a el mercado más cercano y podía abastecerse de provisiones para poder mantenerse a el mismo y su familia, atrás quedaron esos días en los cuales se podía ir tranquilamente a la panadería mas cercana por un pedazo de pan y poder tener algo para cenar, aquellos días pasaron a ser un simple recuerdo para todos los venezolanos, una odisea general para el país en especial para aquellos que ya olvidaron lo que se siente comer las tres comidas al día y basta con mirar en las calles los amplios grupos de personas desesperadas buscando alimentos en la basura, despojados de toda dignidad porque no pueden conseguir alimentos de otra manera.   

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   Ante esta delicada situación en la que se encuentra el pueblo venezolano, un gobierno corrupto y tramposo pero inteligente como el que se encuentra en este país observó una nueva oportunidad para seguir conservando la fe de las personas, si llegaron a la posición que tienen ahora consintiendo a sus “hijos” ¿por qué no mantenerse de la misma manera? Si sus seguidores tenían hambre, pues había que alimentarlos, y así lo hicieron, el gobierno empezó a distribuir cajas de alimentos a precios muy económicos a la gran mayoría de los hogares venezolanos como una desesperada medida para seguir manteniendo en sus manos a sus seguidores, lo cual vuelve a polarizar el pensar venezolano, mientras aun se observa con mucha tristeza esas personas que ven en una simple caja (que no dura más de dos semanas cabe destacar) la solución a todos sus problemas, encontramos un porcentaje de la población que no encuentra otra manera de alimentarse mas que acceder a aceptar con mucha indignación el intento de soborno del gobierno.    

   Aun con una gran gama de detalles que exponer en cuanto a la difícil situación que atravesamos los venezolanos se me hizo inevitable recordar la famosa película a la cual he hecho referencia anteriormente, vemos un mundo post apocalíptico gobernado por una especia que ha esclavizado al resto de la población y ha colocado a un líder el cual se autoproclama salvador por el hecho de ofrecerle agua a todos sus esclavos, esta triste imagen es idéntica a la que observamos en la cotidianidad del venezolano, un monstruo no necesariamente tiene que tener la piel quemada o necesitar de un aparato en su rostro para poder respirar, un monstruo puede tener un traje rojo y dormir muy tranquilo mientras todo el país que gobierna esta pasando hambre y viviendo en la miseria, un poco de agua que sale de una tubería gigante por las cuales se pelean cientos de personas pueden ser confundidas con una gran cantidad de personas en una fila esperando que llegue un camión que posee alimentos que posteriormente serán vendidos a las masas. Muchas veces he tenido que salir desde horas de la madrugada a las calles para poder intentar conseguir algún alimento que llevar a mi casa, con dolor he observado en silencio mil escenas que hacen explotar mi rabia y mi tristeza, desde lo humillante que es el tener que desperdiciar el tiempo hasta lo triste que puede ser observar a tus hermanos venezolanos peleándose por ver quien llegó primero a la cola, pues como no podía faltar, esta situación ha hecho que incluso muchos venezolanos hayan perdido el respeto en todos los niveles, desde colarse en la fila para poder conseguir alimentos, hasta agredir tanto física como verbalmente a los que se encuentra alrededor, sin respetar ni siquiera las personas mayores, el venezolano ha despertado su instinto mas primitivo el cual es la lucha por sobrevivir cueste lo que cueste.  

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   Tomé la idea de este post justamente cuando me encontraba en uno de esos días en los que me toco salir bien temprano a intentar conseguir algo que comer, en el momento en que llegó el camión distribuidor de alimentos, todas las personas en la fila hicieron un alboroto, se acercaban al mismo e intentaban observar que tenía en su interior, algunos esperanzados porque fueran muchos producto y pudieran conseguir alguno, otros como yo simplemente esperando a lo lejos para ver con que suerte correríamos ese día, al momento que el camión abrió su puerta trasera y empezaron a descargar la mercancía vino a mi mente una de las primeras escenas de la película, no teníamos una gran tubería a punto de expulsar agua y una gran cantidad de personas sedientas, pero si teníamos un gran camión el cual contenía ciertos alimentos y la misma cantidad de personas hambrientas despojadas de toda dignidad aferradas a la esperanza de poder conseguir algo que llevar a la mesa. 

   

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   A esta posición nos ha llevado un gobierno corrupto que no le interesa en lo mas mínimo el pueblo, a una triste imagen que se repite día tras día en cada supermercado, una triste imagen que observamos en cada calle cuando vemos los contenedores de basura despedazados por personas buscando alimento, cuando escuchamos las historias de las madres que tuvieron que acostarse sin cenar para que su hijo tuviera algo que comer, cuando escuchamos al padre triste y derrotado porque no pude pagar el colegio de sus hijos, cuando encendemos el televisor y están transmitiendo a la ganadora de varios premios Oscar “Mad Max”.