Juego de Roles

Al llegar al apartamento, pensé mucho para abrir la puerta, no sabia que sorpresa me esperaba, resople y abrí la puerta sigilosamente. Todo estaba completamente oscuro, Encendí la luz, lo primero que visualice fue sus esposas, su pistola, el equipo de sonido, chocolate y unas cervezas bien frías. En medio de la sala estaba una silla, al cerrar la puerta escuche unos pasos, él solo esperaba que llegara para disfrutar de todo lo que tenia preparado para mi.

Expectante, disfrute de su baile, jamás imagine que un hombre con su seriedad cumpliera una de mis fantasías.
Mientras se desnudaba, me quita las esposas y al instante toma una de las cervezas, baña su pecho y se acerca para que yo absorbiera la cerveza que corría por su cuerpo.

¡No dije nada! Cumplí sus ordenes, mientas sus manos me desnudaban y tocaban cada parte mi cuerpo. Cuando me encontraba completamente desnuda, deslizaba su pistola por mis senos, y mis piernas, el término con su juego. Se sienta en la silla y yo me arrodille para empezar a lamer la cerveza que había terminado de derramar en su pene.
Con mis manos masajeaba sus testículos mientras con mi boca me dedique a darle placer.

---Sigue perra, sigue así--- me decía, y emitía gemidos con cada mamada que le daba. Después de unos largos minutos, libero su semen, que salía disparado en mi boca.

---¡Vamos a la cama! --- dijo con su voz gruesa. Coloco nuevamente las esposas en mi manos a mi espalda, y me tumbo en la cama. Me abrió las piernas y sentí sus labios en mi sexo, su lengua se movía de manera desenfrenada sobre mi clítoris, haciéndome retorcer de placer, hasta conseguir mi orgasmo.