Ángel de Río | Poema.

Tengo metas, tengo sueños, tengo fe de mejoría,
pero no puedo ni siquiera comprar una pizca de pan en la panadería.

Asustada y angustiada, resignada a mi muerte,
por no poder cumplir mis sueños, por no poder ser fuerte.

Una voz cálida y apacible me acoge de repente,
es una gentil niña, un Ángel nada frecuente.

Me toma de la mano, y me da una carta,
en la que dice que para algo estoy invitada.

La niña me mira de repente, y su sonrisa me deleita claramente.

El Ángel nada frecuente desaparece de mi vista,
dejando en mis manos la bonita carta, dejándome desvelada, mirando en el agua del río el reflejo de mi misma.

Me invitan a una cena, me invitan a un festín,
me invitan a un lugar donde hay un hermoso jardín.

Me dan de comer hasta no poder mas, y me dan las gracias por asistir al festín.
Agradecida estoy yo por dejarme asistir, entristecida por no ver a aquel Ángel que ayer vi.

Regreso a mi puente, regreso a mi hogar, caen las gotas del cielo, sopla la brisa del mar.

El río está crecido, ya no me puedo acostar, el piso está mojado, me voy a congelar.

Tengo que correr, no puedo parar, algún otro lugar para descansar yo debo de encontrar.

Al mirar de repente, noto al Ángel no frecuente.

Con una manta en sus manos y su sonrisa elocuente.
Me invita a que pase, me invita a que entre.

Una cama me ha de ofrecer, una llave me ha de ceder,
otra carta bonita ella me ha de conceder.

El Ángel no frecuente desaparece nuevamente, dejándome inconclusa, dejándome confundida eternamente.

El sello le quité, el sobre deseché. Al abrir la carta, una sorpresa me llevé.

Hola querida dama, me dirijo hacia usted, le cedo esta casa, tengo un trabajo para usted.

Cumpla sus metas, quiero verla muy contenta.

Con sonrisa de destello de sol y blanquecina como la luz de la luna.

Dejo esta carta para ti, y te brindo mi ayuda. Porqué en tu mente vi, una chispa de ingenio y ternura.

Gracias a ti Ángel por haberme brindado tu ayuda, donde quieras que te encuentres, te agradeceré siempre por haber sido mi milagrosa loca ayuda.

El agua del mar frío de mi interior se desvaneció, y como el rió al llover, crecí.

By: Nina Flowers.

Pd: Es mi primera poesía o poema, en realidad no las sé diferenciar. Espero que les sea de agrado. La verdad es que era mucho mas largo pero al colocarle una imagen, se borró el principio, y no podía creerlo.

Iba pensando detalladamente en lo que iba a escribir, pero ya luego de acabar no pude recordar esa parte. Intenté rehacer el principio, pero ya no es lo mismo.

Mis disculpas si no se entiende. Pero la chica de la que hablo es una chica pobre, abandonada, que vive bajo un puente al lado de un río con mucho frío.

Donde su única esperanza son las risas destellantes que aunque no le brindan su ayuda, le dan esperanza.