En una red de escritores es primordial la lectura, ella es lo que nos mantiene aquí, todos los escritores tenemos una relación simbiótica con nuestros lectores, porque nos guste o no, siempre tenemos que tener presente que sin lectores, los escritores no existiríamos y viceversa. Y precisamente eso es lo que falla en otras redes sociales, que tenemos ansias por ser leídos, pero no siempre nos gusta leer otros trabajos.

Sin embargo acá el punto no es ese, decidí hacer una entrada para explicar eso que pasa en nuestro cerebro cuando leemos. Como ya saben soy curiosa por naturaleza y me encanta saber qué demonios pasa en mi cerebro cuando hago las cosas que me gustan o las cosas que me parecen frecuentes. Así que si quieres averiguarlo, quédate conmigo y acompáñame a este viaje al cerebro en la lectura.

En pocas palabras lo que ocurre en nuestro cerebro es que se ilumina, esta demostrado científicamente que cuando leemos los neurotransmisores se renuevan rápidamente, tanto la materia gris como la materia blanca se incrementan y el sistema sanguíneo se incrementa en la zona cerebral.

Cuando leemos en silencio en nuestro cerebro se activan las regiones motoras, estas regiones también se activan cuando estamos en movimiento, lo que nos permite tener un mejor rendimiento motor. Cuando leemos en voz alta pone a trabajar las zonas de nuestro cerebro encargadas de controlar lo experiencial. Mientras que leer en sí mismo, activa las zonas del procesamiento del lenguaje, por lo que leer indudablemente mejora nuestro rendimiento cognitivo.

Se han preguntado por qué cuando leemos una novela es como si pudiéramos sentir lo que sienten los personajes, es como si viviéramos sus sentimientos y pensamientos… esto tiene una explicación simple, nuestro cerebro no hace una distinción real entre vivir o leer una experiencia, por lo que la zona encargada de las experiencias se ilumina de igual manera tanto si lees como si lo vives.

Estudios realizados en la Universidad de Stanford confirmaron que los diferentes estilos de lecturas crean patrones distintos en el cerebro, un análisis literario supone un trabajo cognitivo completo, cuando leemos por placer el flujo sanguíneo en la zona cerebral aumenta en distintas áreas del cerebro. Lo que se resume en que dependiendo de lo que leamos, las zonas que se iluminan en nuestro cerebro son distintas.

Por lo general nos identificamos con algunos de los personajes de nuestros libros, esto desarrolla nuestra empatía, poder sentir lo que otro siente y ponernos de alguna manera en sus zapatos, algunos nacen con este don, otros necesitamos desarrollarlo y está demostrado que una de las mejores manera de comenzar a practicar la empatía comienza por un libro. Estudios recientes de la NYU demostraron que las áreas en el cerebro que se ven iluminadas ante un acto de empatía en las personas en la vida real, son las mismas que se ven iluminadas cuando leemos y sentimos empatía por los personajes.

Cuando leemos nuestro cerebro crea automáticamente imágenes mentales que recrean lo que estamos leyendo, nuestra imaginación se activa y crea fotos que aparecen mientras leemos lo descrito en el texto. Investigaciones demuestran que las personas son más capaces de asociar objetos e identificarlos cuando han leído previamente alguna frase o texto que los describía.

Queridos lectores espero que les haya gustado esta entrada llena de datos curiosos acerca de lo que ocurre en nuestro cerebro cuando leemos, para mi leer es casi instintivo y es una actividad que me encanta. Si desean realizar algún aporte o sugerencia, siempre es bienvenida en los comentarios.