Nunca aprendes a ser emigrante...
Cuando tenía 5 años mi mamá me dijo que nos ibamos a otro país. Yo estaba muy preocupada, no sabía si en los televisores de Venezuela podía ver "Bananas en pijama". Mi primo más cercano me regaló un osito con un lazo rojo (que todavía tengo) y recuerdo cómo la oleada de calor me golpeó al bajar las escaleritas del avión. Viniendo de un lugar tan frío (Bogotá) a vivir en una ciudad en la que 30 grados es "fresco", no es algo fácil. Mis cachetes eran más rosaditos de lo normal.
Mi familia, al igual que otras, vio en Venezuela, una oportunidad de progreso. Es por eso que anteriormente era normal conocer personas de diversos países en el colegio, el trabajo o la universidad. Hoy el panorama es distinto, cada vez van quedando menos personas. Aunque son países vecinos, el cambio fue y sigue siendo, abrumante. Las costumbres, las palabras, la comida... todo es diferente. A menos que lo diga, paso desapercibida.
Al llegar tan pequeña, logré que el acento venezolano se me "pegara" a la perfección. Basta con que hable con mi mamá o algún familiar por teléfono para que se me cambie el "chip" y mi acento colombiano aflore causando sorpresa entre mis conocidos quienes aseguran que hablo más venezolano que ellos.
Hoy en día, la situación país, ha obligado a muchos a irse a otros lugares del mundo, algunos incluso más lejos que un país vecino. Pienso en ellos y los comprendo, es complicado. Nunca se aprende a ser emigrante. Hay muchas personas que hablarán mal de tu país, de tu gente, de tus costumbres e incluso insultarán elementos simbólicos de tu tierra que te romperá el corazón.
Con el tiempo te acostumbras, haces caso omiso a ese tipo de comentarios despectivos. Luego de varios años lejos de tu país natal, volver también se siente raro. Sabes que es tu lugar pero no te parece lo mismo que recordabas. Muchas cosas han cambiado. Es una mezcolanza de sentimientos en los que predomina la nostalgia por lo que creías haber dejado y lo que realmente es.
Hoy, ese sentimiento me embarga cada vez que pienso en cómo la situación de mi segunda casa (Venezuela) me está obligando a pensar en irme antes de que sea demasiado tarde. Aunque lo más lógico sea devolverme a mi país de origen, me invade la inseguridad. Nunca aprendes a ser emigrante... nunca aprendes a dejar lo que sientes como tuyo.
Paradójicamente, en estos últimos meses he tenido que escuchar comentarios xenofóbicos de venezolanos que sin siquiera pensarlo, deciden conversar conmigo sobre su rechazo hacia las personas de otros países. Yo sólo asiento y escucho. Por mi mente retumba un "no puedo creerlo". ¿Cómo es que en este momento tan triste que viven las familias venezolanas, teniendo que separarse por tiempo indefinido, todavía existen personas que siguen tratando de cultivar divisiones entre seres humanos basándose en el lugar de nacimiento?
Personas que tienen familiares en otros países, que saben que los suyos están en algún lugar donde son minoría, no tienen la capacidad de analizar lo horrible que debe ser para ellos sentir el rechazo de otros tan sólo por haber nacido en Venezuela y están aqui, dado rienda suelta una verborrea absurda alimentada por un odio irrisorio a otro ser humano igual que ellos.
Cuando emigras, sientes que dejas el lugar al que perteneces para tratar de encajar en otro lugar y hacerlo "tu casa". Este post tiene como finalidad propiciar un momento reflexivo entre quienes lo lean y se cuestionen:
Hola @ladaural este post es muy interesante y me ha tocado la patata :), hablo enserio es muy bueno y comparto una situacion similar a la tuya pero en mi caso es un poco mas duro. Lo que me lleva a pensar que tendria que compartir mi historia en un post entero, porque este es el tuyo y felicidades gran post. tienes mi voto y te sigo
Me gustaría conocer tu historia. A veces nos sentimos tan incomprendidos, pensando que somos los únicos con equis problema y resulta que siempre hay alguien que puede entenderte. Personalmente este tema me genera un montón de emociones, más porque entre la situación del país, casi todos mis amigos se han ido, mi familia no está aquí... el panorama político cada vez se ve más negro. Estoy en crisis existencial. @crazystreak también te sigo. Gracias por tu comentario. Ya no me siento tan sola al respecto.
Buena reflexión @ladaural actualmente es una situación muy dura, sin embargo; todo es por mejorar y tener una calidad de vida. También creo que todos tememos al cambio, ya que salimos de nuestra zona de confort y vamos directamente a aquello que no conocemos y nos da miedo, pero hay que pensar que los cambios suelen ser buenos y hay que aprender a luchar contra lo que nos deprime, hay mucha enseñanza detrás de todo esto, hay que saber usarla para estos casos.
Saludos! :)
Wow me encanto tu post y de verdad me pego mucho, si tengo un amigo que vino de chile para ''conseguir un mejor futuro aca en venezuela'' y ahora se siente peor. Debemos evitar la xenofobia y ayudarnos entre todos juntos y asi surgiremos logrando cosas mejores, enlacemos nuestras manos para un futuro mejor.
Saludos desde anzoategui, venezuela bella @ladaural @mariagil1
Sí, es frustrante para quienes vinimos por un futuro mejor, tener que viir esta situación tan fuerte. La xenofobia es el peor enemigo de la sociedad y más aún, para los venezolanos. No entiendo porqué lo promueven :/ Saludos <3 @mariagil1
Excelente post!!! desde ya te sigo y espero que en esta tu casa venezolana o en tu otra casa (colombiana) te logres sentir igual de cómoda (es mejor tener dos casas que solo una jejeje)
Gracias :D si eso espero jaja tienes razón, siempre es mejor dos que una xD
excelente :)
Gracias :D <3
Es una decisión difícil primero que nada. Tal vez tu cuando eras pequeña fue algo mas natural pues la decisión fue tomada por otra persona. Actualmente yo pienso si irme o no. No es fácil: aquí están mis amigos, mi familia. Aquí están las costumbres que amo, los lugares que amo y me traen recuerdos, aquí están los momentos y las experiencias que me hacen quien soy. Y como leí una vez cuando te vayas seras emigrante hasta en tu propio país.
@leikerm96 es así, te lo digo yo por experiencia propia. Yo viejo a colombia y aunque esta toda mi familia, no es lo mismo. Llego a mi ciudad aqui en Venezuela y uff, me siento en casa. Es complicado :/ me frustra tanto tener este sentimiento por culpa de un gobierno ineficiente.
Muy interesante reflexión. La verdad es una situación muy difícil. En verdad no comprendo por que ese afan de colocar fronteras, de ver las diferencias, en vez de las simílitudes, que comunmente son mas. Te agradezco mucho por compartir tus sentimientos y reflexiones con nosotros, es bueno comprender al otro y para quienes hemos tenido la fortuna de no enfrentarnos a esas difícultades lo agradecémos aún mas por que nos permite acecarnos mas como humanos.
Sí, yo tampovo lo entiendo. Todos somos iguales, no deberían existir ese tipo de restricciones o diferencias tan marcadas de forma negativa tan sólo por el lugar en el que nacimos. Sí, me gusta ponerme en el lugar de los demás y analizar qué sentiría en determinada situación, ciertamente nos ayuda a entendernos. Gracias por tu comentario.
Hola buenas noches ladaural!!
sabes me gusto leerte, puesto que a medida que te iba leyendo sentía que me leía a mi mismo, es que lo tu expresa yo también lo siento, y es triste escuchar comentarios xenofobicos vengan de donde venga, debido a que el que lo comenta no se da cuenta que también se esta rechazando a sí mismo.
Muy bonito tu trabajo, te felicito.