La apuesta (Cuentochip)
Fuente
El extraño llegó a la feria del pueblo donde ofrecían dar un premio al que realizara la acción más difícil.
-Morderé una de mis orejas con los dientes.
Todos los miraron y rieron.
-¿No me creen? ¿Quién quiere apostar? –los retó.
Todos lo hicieron a que no lo lograría.
Él sacó la dentadura postiza de su boca y realizó lo que había prometido.
Tomó el dinero y se marchó ante las caras asombradas de todos.
No existía regla que dijera que esto era ilegal, por lo tanto aunque tenían la certeza de haber sido estafados no podían reclamar su dinero.
Según es lo más difícil de lograr y él lo hizo en forma muy creativa, nadie estafado, yo me reí mucho y el hombre contento con su pago, estupendo final. @joseph1956