Vale la Pena Seguir

¿Sientes que te han destruido el corazón muchas veces?, ¿que nadie valora tu esfuerzo o dedicación en lo que haces?, ¿algunas personas te dan la espalda?, o quizá, ¿necesitas estar en soledad?     

A veces nos sentimos como barcos a la deriva, destruidos por una tormenta de acontecimientos, circunstancias, y hasta malas decisiones, que nos alejan del norte planteado, o simplemente nos volvemos náufragos en un mundo que desconocemos, o que queremos olvidar.

Si estas comenzando a vivir, es decir eres adolescente, te identificas fácilmente con este cuestionamiento; pero si eres adulto, te harás el duro, para asumir que puedes pasar nuevamente por situaciones así.

Vamos, relájate un poco, como dirían los chamos ahora "bájale 2", o bien, bájale toda la intensidad que realmente necesites, para que pienses con cabeza fría, es decir, con calma y tranquilidad.

Si bien es difícil asumir que hemos fallado, o que otros nos han fallado, siempre hay alternativas, formas diversas para levantarse de la caída, y seguir adelante. Cuesta de verdad abrir los ojos, ver la verdad, afrontarla y cruzar todas las barreras.

Pero, ¿quien dijo que sería fácil?

Y pues, mi escrito tiene como título: "Vale la pena seguir", motivado por una canción cristiana de nombre: PARA QUE SIGAS AQUÍ, que expresa tanto, con sentido y mucho valor.

Porque vale la pena seguir, vale la pena arriesgar, y como lo expreso en mis otros escritos, vale la pena sentirse vivo, vivir, es todo lo que debemos hacer, aliados a una fuerza única, que nos caracteriza como seres humanos, la fuerza del amor.

Pero el amor no puede ser aislado, no, todo debe concentrarse allí, comenzando primero por nosotros mismos, valorando lo que somos, lo que tenemos, y lo que queremos hacer, para siempre seguir adelante, y al encontrarnos con los demás, transmitir tanta buena energía, que puedas contagiarlos.

De esta manera, tomaremos las bases de nuestro barco, lo puliremos y zarparemos de nuevo, en buscada de ese norte que siempre está ahí, esperando por nosotros, por conquistarlo, asumiendo que encontraremos nuevos tropiezos, huracanes y tornados, pero dispuestos a cubrirnos y avanzar.

Amigos, no nos quedemos de brazos cruzados, esperando que la solución caiga del cielo, o aparezca de manera mágica, la solución siempre está dentro de nosotros mismos, con coraje, valentía, mucha alegría y entusiasmo, porque ¡Vale la pena seguir! 

Gracias por leer mis pensamientos, ideas que fluyen por la experiencia y el amor por la vida. Espero les haya llegado y sea de utilidad para motivar sus almas.