El caos siempre va a estar presente y más en una ciudad como Caracas pero también es verdad que si buscamos diferentes puntos de vistas la ciudad puede llegar a ser mucho más amable de lo que podemos percibir.

Caracas es una ciudad que engaña a muchos ya que podemos hacerle fotos y creer que es una joya latinoamericana pero la verdad es que no es tan así. A la capital hay que saberla querer, con todo lo bueno pero también con lo malo que pueda tener.

Ahora, acá está la misma foto hecha en el mismo lugat pero con unas cuantas horas de diferencia pero esa serenidad y calma se sigue trasmitiendo.

No hay diferencia entre el día y la noche, al final sus calles y edificios siempre estarán ahi, su gente siempre estará ahí aparentando que todo está en calma y en un ambiente apacible cuando la realidad es otra muy diferente. Por eso yo siempre me quedo en las alturas.