VAMPIROS ENERGÉTICOS

Aunque muy poco tengamos en nuestra psíquis, la sólida idea de pensar que somos energía, debido que nos ha vendido los conceptos religiosos convencionalistas que radica en la creación a imagen y semejanza de un Dios omnipotente, Debo revelar que efectivamente por nuestro cuerpo subyace una fuente energética capaz de ser percibida por el ojo humano.

¿A cuántas chicas no le ha pasado que se planchan el cabello que se les para los pelitos por la estática?, o ¿cuántas veces no ha rozado usted con alguien y ha sentido esas chispas que se generan por la unión de los cuerpos?, o mejor aún, ¿Cuántas veces no se les ha quemado en sus propias manos algún artefacto: bombillo, plancha, teléfono, cargadores, etc ? Pues muy sencillo de responder, estas cosas suceden por la gran cantidad de energía que tenemos en nuestro cuerpo, sea positiva o negativa.

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Partiendo de una conversación entre amigos surgió la existencia de “vampiros energéticos”, lo sé suena a un electricista que se roba la energía ja-ja-ja-ja , pero no es así, según varias lecturas y conjeturas realizadas con personas vinculadas al mundo espiritual, estos personajes son aquellos que tienen la posibilidad de extraer tu energía, causando un debilidad física-mental. Suena algo un poco absurdo, sin embargo esto tiene sus bases bien firmes que apoyan su existencia.

Por ejemplo:

Hemos de sentirnos bien, con energía y entusiasmo y de pronto llegas a un lugar, sea de casa de un amigo, vecino, novio(a), entre otros, y repentinamente sientes un terrible agotamiento, fatiga, dolores de cabeza. Esto pasa porque en cierto modo estamos interactuando con una persona que no tiene manejo de sus energías e irradia tensión en el ambiente, acompañado de una dosis de dilemas personales en las que te ves expuesto a consumirte en los problemas ajenos. Hemos sido víctimas de aquellas personas que se victimarán y demandarán mucha atención debido a su incapacidad de auto-solventarse emocionalmente.

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Anécdota

Una amiga muy cercana está siendo víctima de un vampiro energético, este fue su pareja durante nueve años, cuya relación siempre fue gobernada por el espectro controlador y egocentrista por parte de él. Entre gritos, insultos, notas y detalles para tapar las faltas se fue alimentando este vampiro a través de la manipulación.
Hace 10 meses él vampiro decide jugar moviendo las cartas a su manera y decide que es momento de alejarse, dejando a su víctima por el piso, entre la tristeza y decepción ella se sumerge el optimismo y entiende que la distancia le abrió puestas a un mundo más tranquilo, reinado de armonía y libertad.
Al cabo de dos meses reaparece este incapacitado espiritual para crear confusiones entre un “no somos nada, pero tampoco quiero que seas de nadie” ella de debatía entre alejarse o no seguir permitiendo dicha situación, por lo que una noticia bastante fuerte termina de quitar la venda de sus ojos: “ tengo a una mujer con 6 meses de embarazo”, “estoy arrepentido”, “soy un ser humano y cometo errores”, “quiero la vida que tenía a tu lado de vuelta” “perdóname, perdóname, perdóname(…)”
Así pues, el perdón en esta historia fue dado, pero como una forma de cerrar ciclo y seguir. El vampiro que se nutría de la energía de esta mujer, se ha ido debilitando gradualmente debido a la carencia de esa fuente de energía a la que podía manipular argumentándose de ideologías moralinas que plasma el concepto trillado de que el ser humano tiene derecho a equivocarse y a ser perdonado, asumiendo con ello una postura yoista en el que el objeto primordial es su bienestar.

Vampiros consientes

Partiendo del ejemplo citado, podemos aseverar que es el vivo retrato de un vampiro consiente. Este tipo de personas actúan persuasivamente para lograr su propósito, haciendo uso de las teclas que debilitan la esencia de la persona a la que se está manipulando. Generalmente las víctimas son aquellas que están llenas de amor, tolerancia y bondad, haciéndolas vulnerables a la extracción de sus energías, hundiéndola en una existencia gris.

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¿HAS SIDO VÍCTIMA DE ESTOS VAMPIROS?