Mamá naturaleza es quien decide donde las plantas crecerán, plantando Bambú (Bambusa Vulgaris)

Desde hace más de 10 años hicimos todo para sembrar bambú, hoy les contamos como después de muchísimos intentos fallidos la planta nació en el lugar menos indicado.

Existen aproximadamente 1500 variedades de bambú, pero la que aquí predomina es una variedad de color amarillo con franjas verdes verticales, (Bambusa Vulgaris) crece aproximadamente entre los 15 y 20 metros de altura y su diámetro es de aproximadamente los 7 y 11 centímetros de grosor, con sus cañas huecas entre nudo y nudo de una distancia aproximada de 15 centímetros, esta planta es muy hermosa y aparte de brindar oxigeno al ambiente circundante, constituye una fuente de generación de biomasa para fortalecer el suelo, es una grandiosa barrera viva para evitar los deslaves en los terrenos; así mismo constituye un bello hábitat para muchos animales que llegan a dormir en sus hermosas varas, en el suelo las serpientes les encanta esta planta por que hace cavernas subterráneas en las que pueden hacer sus nidos, el hombre ha sido muy beneficiado con estas plantas ya que constituyen materia prima muy utilizada en construcciones ecológicas, artesanías, sillas, comida ya que sus brotes tiernos son muy sabrosos, eso es un resumen muy pero muy corto de lo beneficioso que esta planta es, pero el objetivo de este articulo es contarles lo que nos paso en esta aventura de obtener tal especie en nuestra granjita.

Aparte de todos los beneficios que anteriormente les narre el origen de mi afición por plantar esta especie se remonta varios años atrás.

Cuando era niño jugaba en el patio de don Medardo nuestro vecino, con sus hijas Irma y Delmy (muy lindas por cierto), donde existía un bambusal frondoso de la variedad amarilla, que así como el Abeto del cuento de Heidi la niña de los Alpes, sonaba y resoplaba aquel bambusal, así que yo como todo niño envidioso dije algún día tendré un bambusal así como el del vecino, para disfrutar su frescura y escuchar sus resoplidos en aquellos días de ventisca en el verano.

Primero le rogué a todo el vecindario que me llevaran una caña de bamboo pero por falta de tiempo, dedicación nunca se pudo realizar, al final fuimos a un vivero y hablamos con el encargado si podría ayudarnos y así lo hizo aquí les muestro la plántula que nos obsequio al ver mi gran interés por la misma, con papa nos pusimos manos a la obra, aquí pueden ver la clase de planta que nos regalaron hermosa, grande con muchas yemas que yo dije esto será un gran bambusal.

Seleccionando el mejor lugar posible donde no estorbara y creciera a su amplio placer,
No me pregunten por que pero como sabemos que el bamboo tarda unos 7 años en crecer estuve esperando y para mi sorpresa apareció un agujero en el lugar y al verificar no había ni seña de aquel bamboo o algo que indicara que iba a crecer ahí.

Muy triste fui con papá a un lugar y con un hacha arrancamos de una parte silvestre algunas cañas de la mejor calidad para sembrarlas en dos lugares diferentes, aquí pueden ver uno de ellos, mi sobrina nos apoyo en la siembra como pueden ver.

Casualmente sobro un pedazo de raíz que papá me dijo bota eso que no sirve, yo no hallaba que hacer, así que la puse en el suelo y la pisotee en la entrada de la granjita y que creen, las plantas cuidadas, abonadas, regadas con agua durante le verano se secaron y aquel pedazo que yo bote empezó a emerger del suelo en medio de un pedregal como pueden ver en las siguientes fotos.

Hoy dejamos que las plantas crezcan ahí ya que es el único lugar donde tendremos bamboo, yo muy feliz por tener finalmente la planta de mi infancia, papá tambien, como ven con la naturaleza no se puede, como seres humanos nos debemos acoplar a ella y no interferir en su camino ya que ella es sabia y sabrá donde es el lugar ideal para que las plantas crezcan.

Gracias por ver y comentar.
Gracias a papá y Dalila por el gran apoyo.

Recuerden el material es propio incluidas las fotos.