La Coruña– De Venezuela para el Mundo

Hace no mucho tiempo tuve la gran oportunidad de realizar un grandioso viaje a un país de mucha belleza y grandiosa historia y cultura: España. Fue la primera vez que pisé suelo europeo y con el orgullo de representar a mi país en un gran evento internacional en lo que más amo: la medicina y específicamente el campo de la traumatología.

Seis meses antes había recibido la honorable distinción de haber sido seleccionado entre los mejores autores con trabajos de investigación de cirugía ortopédica y traumatología en toda Hispanoamérica, al principio casi no lo creía, pero luego de recibir aquella distinción por la Sociedad Española de Cirugía Ortopédica y Traumatología (SECOT) no pude contener la emoción de compartirlo con toda mi familia y amigos.

Aunque rápidamente la información se difundió en el hospital, la situación económica de mi país y el escaso sueldo de un médico venezolano (uno de los peores sueldos médicos a nivel mundial) no me permitieron fácilmente reunir lo suficiente como para permanecer poco menos de una semana en España con comodidad. Incluso el mismo pasaje fue exonerado luego de realizar una gran cantidad de trámites y explicar que mis intenciones no eran otras que representar científicamente a nuestro país.

En fin… Luego de tantos obstáculos, logré realizar este grandioso viaje. Y lleno de un galón de expectativas y emociones encontradas pude salir desde Caracas para llegar al Aeropuerto Internacional de Barajas en Madrid luego de más de 8 horas de vuelo y un cambio de horario agotador. Aun así, mis ojos no se cerraban ante las maravillosas vistas de esta ciudad.

Antes de salir rumbo a mi destino final tuve la oportunidad de realizar un recorrido breve y conocer Madrid. El solo salir de ese gigantesco aeropuerto del tamaño de una ciudad hasta el centro de Madrid es necesario tomar primero un bus desde una terminal a otra y luego el metro o tren.

Luego de comer unos famosos conos de queso con jamón serrano y acompañarlos con una cerveza Corona tomé un bus Alsa con destino a La Coruña. Fueron más de 6 horas de viaje y un gran cansancio acumulado, por lo que el sueño me estaba superando y no fue sino después de llegar a un acogedor hospedaje luego de casi dos días de recorrido que pude por fin dormir y sin siquiera abrir la maleta hasta el día siguiente.

Llegó el día del congreso, y ubicado en una bella zona costera en una infraestructura de nombre PALEXCO se desenvolvió uno de los eventos científicos más importantes de España en Cirugía Ortopédica y Traumatología. Fue un honor asi como una emoción recibir aquel premio y diploma por tan excelentísima sociedad, así como representar a mi país pese a las adversidades. Logré conocer gran cantidad de colegas de otras latitudes desde Canadá, Inglaterra, Suiza hasta República Dominicana. Desarrollo tecnológico de última generación y avances de primera. Y por último la oportunidad de exponer mis ideas ante cientos de personalidades de mi área en Europa y el mundo.

Por supuesto luego de aquel banquete de conocimientos no pude resistirme a conocer los alrededores de la zona y convertirme en un turista más emocionado de compartir las fotos de mis paradas.