El Autor. Escribir... !por huevos!
Os dejo el trailer de "El Autor" por si alguien quiere jugar a ver dónde salgo... La película ya ha ganado el Premio de la Crítica (FIPRESCI) en el Festival de Toronto (Toronto International Film Fest) y el sábado pasado inauguró la Sección Oficial del Festival Internacional de Cine de San Sebastián.
(Trailer Oficial de El Autor para su promoción. Youtube)
Las críticas han sido unánimes aplaudiendo el talento de su director, Manuel Martín Cuenca, y el de los actores (el de quienes interpretan los personajes principales, no me refiero a mí que sólo hago un papel pequeño, jajajajaja). Os dejo una de esas crónicas favorables publicadas en la prensa a la salida de los actores y del director del pase oficial en San Sebastián:
http://www.abc.es/play/cine/noticias/abci-martin-cuenca-autor-y-actores-arrasan-todo-201709240039_noticia.html
Sí, la película está basada en una novela, El Móvil, que escribió con sólo 23 años el escritor Javier Cercas. Lo que aprovecho para recomendar también leer a Cercas, tanto sus libros como sus opiniones sociales y morales en sus artículos publicados en el diario El País. Además de escritor, Javier Cercas fue profesor en las universidades de Illinois, en EEUU, y en la de Girona en Cataluña, España. Además de aquella novelita de juventud, Cercas es autor de gran éxito de obras como Soldados de Salamina (también llevada al cine), Anatomía de un instante, El impostor, El monarca de las sombras,...)
(Imagen del escritor Javier Cercas. Foto by Agencia EFE, obtenida de elconfidencial.com)
Como la película no se estrena hasta la segunda quincena de noviembre por ahora no os diré mucho más. Quizá que, como hace el protagonista de la película empeñado en tener un talento que no tiene, no siempre sirve de algo poner, literalmente, los huevos sobre la mesa... Gracias
jajajajaja.... ¿hay premio para quien lo adivine?
jajajajajaja tu premio, @mlkaverno, es el primero, si te conformas con un cafelito en Málaga...
Muy interesante tu post :)
Viendo esta película y leyendo el libro de Javier Cercas me acordé de tanta gente que piensa eso de: "No sé si empezar a tocar un instrumento de música porque no sé si valdré para eso".
Con el paso del tiempo las artes han ido, poco a poco, profesionalizándose. Esto podría ser algo positivo porque está bien que la gente se pueda ganar la vida haciendo lo que le gusta, pero también es verdad, que parece que a veces se nos olvida que las artes debieran ser algo así como "el pan nuestro de cada día".
De la misma forma que nos alimentamos, dormimos o hacemos deporte, creo que deberíamos hacer el mismo uso con las artes. No tanto pensando en el futuro, si no, en el presente. En las artes "per se".
Los beneficios que las artes, y me centro en la música por ser mi especialidad, provocan tanto en el que la percibe como en el que las ejecuta están más que demostrados por la ciencia. Por poner un ejemplo, comenzar a tocar un instrumento musical debería ser recomendado por los médicos en sus consultas. De la misma forma que nos aconsejan no añadir azúcar en las comidas, no comer bollycaos o hacer deporte de vez en cuando.
Tocar un instrumento, teniendo en cuenta la sociedad actual y las dificultades que tienen los músicos para desarrollarse plenamente, debería seguir el pensamiento Aristotélico. Esto quiere decir, tocar un instrumento sin llegar a profesionalizarse. Sé que Aristóteles no lo decía por lo que planteo yo aquí, si no que lo decía en contraposición al pensamiento de Platón, que se oponía a tocar un instrumento musical porque se hace con las manos y lo de usar las manos era más propio de escribas que de las personas que hacían doctrina. Para éste, la música se estudiaba teóricamente, sin más.
Las circunstancias de vida actuales han hecho que los músicos profesionales, y artistas en general, tengan que recurrir a otras alternativas como forma de vida que no son precisamente tocar conciertos, realizar performances o dar clases.
Tampoco los organismos sociales se quieren ocupar de esta profesión tan compleja en la que, si bien la performance dura una hora, se necesitan muchas horas de creación y de trabajo para que se pueda llevar a cabo. ¿Quién paga eso? ¿Podrán seguir los artistas trabajando de forma altruista de por vida?
¿Podría las artes estar encaminadas a la desprofesionalización?!