Vicios de letras

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¿Te gusta el café? Mejor dicho, ¿tienes algún vicio? Yo, supongo que sí, malditos vicios. Lo siento, no me gusta maldecir, sucede que tanta molestia y tristeza es lo que siento ahora. Estos hacen daños tan prolongados, supongo que los míos son pensar en tantas cosas, desde lo más inútil hasta lo más útil para mis pasiones en conjunto con este, en una manera gráfica diría que “van tomados de la mano”, seria, mis inmensos y casi incontrolables impulsos de escribir, aspectos que se podrían considerar “estúpidos y exagerados”, aunque en realidad, pueden ser muy poderosos para cualquier emoción, pues estos dos, desmenuzan todas las ideas que captó al observar cualquier elemento, peligroso porque pasan a ser más duraderos, se convierten en pensamientos, que si no se expresan o manifiestan de una u otra manera me carcomen poco a poco, así de simple es mi explicación, pero entendible.

Aquí es donde de nuevo te vuelves el tema principal, lo que más temía se volvió cierto y real, tan real como este vació que constantemente vive en mí, asquerosa naturaleza humana que me obliga a buscar el amor constantemente, que me hizo ser tan “cursi, dulce y cliché”, ¿tan cutre me he vuelto? ¿Debe ser qué esto no es lo mío? Tal vez te preguntarás: “¿Cuál es ese temor?” Temía a que tu inmensa belleza fuera como el fuego o las rosas, tan hermosas y dignas del aprecio absoluto pero, solamente atrévete a tocarlas y las consecuencias serán dolorosamente irreversibles. Fue miserable pensar que tenía alguna oportunidad contigo, supongo, que tu increíble amabilidad de no querer lastimar a nadie directamente; terminaste disfrazando lo que sentías tras “bonitas” palabras de rechazos indirecto, dejaban en duda las probabilidades de algo, que, a pesar de ser mínima, “existía”. Supongo que algunas cosas no se vuelven reales, son simples ilusiones que a lo mejor se desvanezcan con el tiempo. Me imagino que estoy siendo muy exagerado, que lastima para mí fue pedirte un beso, creo que ya es tiempo de dejar de agobiarte, sucede que al igual que puedes generar un paraíso en mi mente, logras crear un infierno en mi corazón.

Me empezaste a atraer porque pensé que eres un reto, sin duda no me equivoqué, creo que de cierta forma, gracias a ti, mejoré en algunos aspectos No eres fácil, eso me atrapo, y me encerró en una esfera. Creo que tendré que… Bueno, ni yo lo sé, esto parece un círculo vicioso, que asco por mí.

Dicen que el cielo es un límite, pero tú para mi vas mucho más allá de eso por todo lo que tuve que quebrantar y recrear para mejorar. No sé si te lo he dicho antes, pero en algunas ocasiones las personas lloran al leer lo que escribo, la mayoría de las veces es por felicidad. Me atrevo a decir que es por la honestidad y la manera en que expreso mi verdad, en esta sociedad nadie se encuentra acostumbrado a recibirla. Así que hazme un favor, e intenta no mentirme. Mi chica, jamás quise incomodarte y lo siento por eso, y por disculparme tanto, pero todo lo que me ha ocurrido me ha llevado a ser así, afrodita de mi mundo nunca pierdas tu encanto, incluso después de que te hice un “cumplido” bajo el fuego de tus ojos ¿enojados?

Bueno, ahora que lo veo todo de manera distinta, puedo admitir que mi ceguera fue increíble, el corazón engaña lo que la mente intenta exponer.

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