La chocada y la robada

11 años manejando y me bastó solo estar parada en un semáforo delante de la persona equivocada para experimentar mi primer accidente de tránsito y en carro ajeno.

Hace una semana exactamente, 15 de agosto, fue una fecha inolvidable, le hicieron una intervención quirúrgica a mi abuela de 78 años, la séptima de su historial (le encanta hacer ese recuento) y aunque todos estábamos seguros de que iba a salir excelente, era inevitable estar nerviosos o preocupados.

Fue un día de sentimientos encontrados, también era el cumpleaños de mi primo más pequeño (hermano de @stillstreet quien por cierto es la única testigo a mi favor del caso) y al día siguiente el de mi sobrina.

Mi prima @stillstreet había pasado la noche anterior en el hospital y me tocó ir a buscarla y dejar a mi madre allá. No nos fuimos directamente a la casa porque teníamos cosas que comprar primero.

Mientras íbamos atravesando una de las principales avenidas de Margarita (La Av. 4 de mayo) yo le estaba contando que la noche anterior una tía mía cayó en su carro en una zanja frente a la casa donde vivimos allá, y como era puro charco le costó mucho salir y generó una lluvia de lodo a su alrededor. Mi cuñado salió inmediatamente a burlarse y ella me dijo "Seguro ya ese va a llamar a tu tío para contarle" a lo que yo le respondí; Por supuesto, el hace dos meses volcó la van del negocio y todo tuvo una explicación muy lógica, era una curva, había aceite en la carretera, había mucha brisa, tenía un vidrio abajo y una pieza del volante estaba defectuosa, pero cuando una cae en un charco la única lógica es que así son las mujeres manejando y de paso tú eres gocha (En Venezuela gochos=andinos y existen muchos chistes burlones sobre su inteligencia no sé por qué).

En el instante en el que le comenté eso a mi prima, quedé en un semáforo en rojo, puse stop al carro y cuando nos dispusimos a seguir conversando nos sacó de nuestros asientos y rodó el carro al menos dos metros un golpe desde atrás. Para mí todo fue muy confuso en el momento, antes de bajarme del carro mi primer pensamiento fue "hasta qué hora iremos a estar en esto?" no era consciente de que había recibido un golpe que había hundido la maleta y acabado con el vidrio trasero de la camioneta.

Cuando noté eso las piernas me empezaron a temblar, pero mi gen dominante de macha-alfa-de-la-situación hizo de las suyas y empecé a malandrearle al chofer del autobús que me chocó, que para mi suerte se veía mucho menor que yo, estaba definitivamente más asustado que yo, estaba consciente de que era su culpa y estaba drogado/amanecido. No para añadir un punto a mi favor sino porque cuando se involucró la policía lo acorralaron por eso.

En el calor del momento, como siempre, hay un buen venezolano empático, solidario y oportunista, que aprovechó la situación para sacar del asiento del copiloto la cartera de @stillstreet quien tuvo la suerte de haber dejado caer uno de sus celulares en el momento del choque a un lugar casi invisible y el otro lo cargaba en la mano, aunque cuando nos dijeron que habían sacado la cartera dimos uno de ellos por perdido. Lamentablemente si se llevó una Samsung Galaxy Tab, unas valiosas pastillas de tramadol para el post-operatorio, un cepillo de dientes que de seguro ya no le quitaban ni un pedazo de pollo de las muelas, 10mil bolívares en efectivo con los que solo habrá podido comprar un pase de perico (cocaina) y por más que intentó sacarle dinero de todas sus tarjetas solo logró hacerle el favor de bloquearlas antes de que ella se comunicara con el banco.

Todo el asunto del choque se resolvió en una hora aproximadamente, para mi suerte la que quedó como malandra fui yo porque a pesar de que el chofer cumplía los requisitos físicos nunca me amenazó con matarme ni nada por el estilo, al contrario casi llora porque le dije que el que nos robó la cartera era un cómplice de él y además mi abuela salió por sobre las expectativas de éxito de la operación y con el plus de que ese día fue la única del grupo que había ingresado a hospitalización la tarde anterior que lograron operar y no mandaron para su casa.

Lo único malo es que aquí voy, pagando la puerta.

PD: Si ven un vidrio rectangular estrellado acostado en la isla del semáforo de la panadería 4 de Mayo y de paso conocen a un buen alquimista, se lo llevan y yo les pago