Los Patinetes Eléctricos | MicroRelato Original #4
En el pueblo ha llegado la moda de los patinetes eléctricos; rápidas, no tan caras como una moto de gasolina, no hay que hacerle un seguro, no tiene normativa. ¿Quién no querría hoy en día tener su trasero pegado a un asiento paseándose por ahí, presumiendo de su gran y resplandeciente nueva adquisición?, conduciendo a toda velocidad en dirección prohibida, por medio de una plaza, una acera, asustando a la gente, ¡y todo eso por solo 1.000€!
El jóven Pedro es de los pocos que no tiene dinero para comprarse una moto así, pero comprende que es una total anarquía, un atropello en todos los sentidos.
La gente no para de llamar a su puerta para enseñarle los patinetes. Todos eran iguales, del mismo color, las mismas características, pero cada uno fanfarroneaba como si el suyo fuese el mejor del mundo. "El mio corre más que el tuyo", "yo me metí por medio de la plaza y una puta vieja me miró raro", "pues pítale, que se quite del medio"; esas frases necias, de gente basura, se repetían cada día. Pedro pensaba que aquella gente no podía salirse con la suya tan fácilmente, pero la "justicia" no hizo nada, como en muchas otras cosas.
Aquella gente no era nada para él, no eran amigos, simplemente unos moscardones en su camino. Aunque para aquella gente, Pedro era una mierda, ¿cómo no iba a tener un patienete eléctrico?, era un ser inferior, ellos unos dioses.
Pedro anda con su tío por las tardes, para hacer deporte. Andan, no van en patienete, moto, ni en coche, ni en avión. Mueven el culo para mantenerse en forma. A pesar de todos los de los patinetes que se les cruzan en su camino, tratando de imponer su ley: cambiar la acera por una pista de velocidad, ellos siguen su camino sin perder la sonrisa y las ganas.
Un año o dos más tarde, Pedro y su tío llevan una vida saludable. A los de los patinetes eléctricos se les está acabando la fiesta, puesto que la ley va a sacar una normativa para ese tipo de vehículos (por fín). Matriculación obligatoria, seguro, etc.
Ahora les tocará vender o acatar las normas. A todos los cerdos le llega su San Martín.
Fuentes
El microrelato es 100% original mío.
La imágen de portada la he creado con imágenes gratis de la aplicación Canva
Posteado desde mi blog de Wordpress SteemPress : https://arkmy.000webhostapp.com/2019/06/los-patinetes-electricos-microrelato-original-4