Mucha gente sufre todos los días. Hay muchas maneras de ayudarlos, pero esto requiere que entendamos su situación y la mejor manera de ayudar. No es suficiente tener compasión y método: estamos dispuestos a pasar tiempo, autodisciplina, paciencia, perseverancia, concentración y sabiduría. Aquí hay once formas de ayudar a los demás. No solo pueden brindar beneficios a los necesitados, sino también ayudarlos a liberarse de la soledad y hacer que las personas tengan sentido:

Fuente

• cuidar a los que sufren

Vamos a cuidar a los enfermos que están enfermos, discapacitados o sufriendo. Si hacemos un trabajo muy duro en el camino para ver a otras personas cargar cosas pesadas o hacer cosas difíciles, le echamos una mano para compartir con él.

• Guíe a los que no saben cómo ayudarse a sí mismos.

Para aquellos que están confundidos en una situación difícil, si lo necesitan, ofrecemos consejos, o al menos escuchamos. Si nuestros gatos y perros están atrapados en la casa, abrimos la puerta y los dejamos salir. Incluso nosotros somos como las moscas atrapadas en la ventana. La mosca no quería estar atrapada en la casa, quería salir, así que la dejamos salir.

• Recompensar a las personas que nos han ayudado.

Es importante sentir que todos los que ayudan al mundo trabajan. También tenemos que tratar de ayudar a quienes han pagado mucho por nosotros, como nuestros padres. Esto debe basarse en la gratitud sincera, no culpable o percibida como una obligación.

• Consuela y protege a los que temen.

Debemos calmar a las personas o animales asustados tanto como sea posible. Si alguien necesita ir a un lugar peligroso y puede resultar lesionado, debemos tratar de protegerlo tanto como sea posible. Para los refugiados que huyen de la violencia, les brindamos refugio y los ayudamos a establecerse. Aquellos que están asustados por la guerra o todo tipo de abusos necesitan nuestra comprensión y ayudarlos a sanar las heridas emocionales.

• Consuela a los que están tristes.

Cuando las personas experimentan, por ejemplo, el divorcio o los seres queridos mueren, tratamos de consolarlos con compasión. Pero nunca debemos pensar en las personas como tontos, pensar en "los pobres". Debemos compartir nuestro dolor con nosotros mismos.

• Dar asistencia material a los pobres.

Las donaciones a organizaciones benéficas son buenas, pero dar limosna a la carretera también es importante. Tenemos que superar nuestra vacilación, especialmente si estas personas sin hogar se ven sucias y desagradables, y la gente no quiere echar un vistazo. En este momento, tenemos que sonreír y respetarlas. Imagínese si la persona que está durmiendo en la calle es nuestra madre o nuestro hijo, ¿cómo podemos seguir caminando en el frío como si viéramos una basura apestosa?

• Presentando el EJEMPLO a aquellos que están cerca de nosotros.

También queremos hacer algo por las personas que les gusta estar cerca de nosotros. No queremos que confíen en nosotros, pero si están muy cerca de nosotros, podemos tratar de enseñarles métodos básicos para ayudarlos a ser felices y ayudar a otros. Pero esto tiene que ser de su interés. El punto no es cambiar a los demás, sino brindar ayuda y consejos generales. Entonces podemos hacer que las relaciones personales sean significativas.

Ayudar a otros a lograr sus deseos.

Ayuda a otros a usar el método correcto. Si otros nos piden que les enseñemos algo, incluso si no nos gusta, pero siempre que sean adecuados para nosotros, tenemos la capacidad, debemos tratar de hacerlo. Al igual que ir a un restaurante con un amigo, es un comportamiento muy desinteresado y egoísta ordenar solo lo que te gusta comer cada vez. Siempre debemos seguir a los demás. Al igual que en las relaciones íntimas, también tenemos que comprometernos en lo que queremos hacer unos con otros. No todo puede ser lo que queramos.

Fuente

• Anima a otros a progresar

Podemos elogiar a los que están en el camino correcto y hacer un buen trabajo, siempre y cuando prestemos atención para no prometerlos en exceso. Esto es especialmente adecuado para aquellos que no están seguros. Para aquellos que tienen buenas cualidades pero ya están un poco orgullosos, podemos alabarle, pero no alabarle delante de él. Todavía queremos animarlos a usar su capacidad para ayudar a otros, pero señalar sus errores para reprimir su arrogancia.

• Enseñar a las personas que tienen una vida dañina a hacer comportamientos útiles.

Si tratamos con personas que viven en una vida muy perjudicial y negativa, no debemos abandonarlos, rechazarlos o condenarlos. En lugar de juzgar a los demás, si están dispuestos a cambiar, debemos tratar de enseñarles cómo superar el comportamiento negativo.

• Si otros métodos no funcionan, usa habilidades especiales.

Algunas personas tienen habilidades extraordinarias. Podemos ser expertos en artes marciales, pero no fáciles de mostrar. Sin embargo, cuando vemos que alguien es atacado y no hay otra manera, deberíamos usar nuestra habilidad para derribar al atacante.

Hay muchas maneras de ayudar a los demás, pero el punto no es solo saber cómo ayudar y qué ayudar, sino también cuándo hay que intervenir para ayudar, y cuándo dejar que aprendan a ayudarse a sí mismos. Para aquellos que obviamente están sufriendo, ya sea física o psicológicamente, necesitamos ayudar de inmediato. Pero la ayuda debe ser apropiada, muy mala o muy mala. Necesitamos ayudar a aquellos que tienen la mala suerte de valerse por sí solos, pero quizás la mejor ayuda a largo plazo es proporcionar las condiciones y herramientas que los hagan autosuficientes.